Por 70 años las burlas de Chivas hacia los aficionados de Atlas fueron una constante, siempre les recordaban y les echaban en cara que no habían ganado un título de liga. Incluso, cuando se daban los enfrentamientos entre ellos muchas veces reclamaban que hubiera un rival que ofreciera más competencia. Eran los tiempos en los que ser aficionado de Atlas era una cuestión de fe mezclada con un acto de masoquismo.
Sin embargo, la historia de Atlas dio un vuelco hace tres años cuando Grupo Orlegi le compró a TV Azteca la franquicia de los rojinegros. Y en este tiempo la nueva directiva ya logró algo que no ha podido hacer Chivas en torneos cortos: alcanzar dos finales de forma consecutiva y la posibilidad de alcanzar un bicampeonato.
En caso de que Atlas logre el campeonato en la final contra Pachuca, Grupo Orlegi estará igualando lo que ha logrado la familia Vergara desde que adquirió a Chivas en 2002. Ya que en 10 años que tiene la familia Vergara al frente del Rebaño Sagrado solo ha alcanzado dos finales de Liga, la del Apertura 2006 y la del Clausura 2017, en ambas las Chivas alcanzaron el título.
Por ello la nueva era de Atlas puede empezar a presumir que está a la altura de lo que es Chivas, ya que en tres años ya lleva dos finales y Grupo Orgeli podría darle alcance a la era Vergara en cuestión de títulos. De hecho, hay que recordar que en los cuartos de final se midieron ambos clubes y ya desde ahí el conjunto rojinegro eliminó al vecino de la ciudad, dejando en claro que ahora los clásicos se han emparejado y que una nueva historia futbolística va iniciando entre los dos equipos más populares en Jalisco.
Aquella promesa de Jorge Vergara (qepd) de que en diez años Chivas sería el mejor equipo de México no ha podido ser cumplida, y tampoco son el más ganador del futbol mexicano. Mientras Atlas sigue transformando su realidad, esa en la que hoy ya son el vecino incómodo, uno que Chivas vio con cierto desdén por 70 años, pero que en los tiempos recientes debe sentir una gran cuota de envidia.
MGC