Javairo Dilrosun fue uno de los fichajes en los que América apostó en los últimos tiempos para convertirse en un tipo importante en el ataque americanista, pero todo se quedó en mero deseo. El neerlandés nunca pudo adaptarse a todo el entorno del club, solo tuvo un gran chispazo en un juego contra Tigres en el que marcó un golazo en el estadio Azteca. Fuera de eso su paso por Coapa fue insípido.
Javairo llamó la atención del LAFC que lo pidió al América como refuerzo para el pasado Mundial de Clubes, la directiva accedió porque desde hace algunos meses tenían claro que el futuro del neerlandés no pasaba por seguir en Coapa, porque se esperaba más y no alcanzó a cubrir las expectativas.
Aunque tuvo buenos pasajes con el conjunto angelino, este determinó no hacer válida la opción de compra, así que lo mandó de vuelta a Coapa donde ya no se le consideró para ser registrado para el Apertura 2025; los cupos de jugadores NFM están llenos y en su sitio llegó Allan Saint-Maximin. Tampoco puede contar con el registro del equipo sub-21, porque esas plazas también ya están ocupadas.
Por lo tanto, Javairo sigue entrenando en Coapa, con el cuadro sub-21; el club está obligado a ofrecerle todas las condiciones para que esté en buen estado físico y cuenta con ellos, aunado a que percibe su salario íntegro, pero no está más en la disciplina del primer equipo, así que la única posibilidad para cambiar ese estatus es que su agente y él mismo acepten alguna de las propuestas que han llegado por contar con sus servicios.
Fuentes del club confirmaron que hay dos clubes de Europa interesados en contar con él, América está abierto a cederlo incluso en condición de préstamo, siempre y cuando se den algunas situaciones, sobre todo de índole salarial. Así, Javairo sigue en América, pero no en el primer equipo, de golpe y porrazo perdió esa etiqueta de refuerzo estelar, para recuperar su carrera debe buscar una salida.
CIG