Por fin parece que el proyecto de Gabriel Milito empieza a tomar forma en Guadalajara. Con el 2-1 sobre Pumas en Ciudad Universitaria, Chivas hiló su tercer triunfo consecutivo y, más allá del marcador, el técnico argentino habló de una evolución franca en el funcionamiento y la mentalidad de su equipo.
“Estamos en una franca evolución. Estos triunfos fortalecen la confianza, el prestigio y sobre todo la seguridad con la que salimos a jugar. Hoy era una prueba muy importante para nosotros, la afrontamos con carácter y decisión”, explicó Milito.
El argentino, fiel a su estilo reflexivo, evitó cualquier tipo de euforia. Prefirió hablar de trabajo y de humildad: “Si nos alejamos de la humildad, del esfuerzo, del trabajo... el futbol te mata a la vuelta de la esquina. En la adversidad hay que sostenerse fuerte, y en el momento del alza, tener mucha humildad”.
Milito reconoció que Chivas está entrando en la parte más delicada del torneo y que el margen de error es mínimo. “Quedan cinco partidos. Ya no hay mucho margen para fallar. Hemos recuperado posiciones, pero necesitamos seguir aumentando nuestro rendimiento y no caer en la comodidad de los resultados”, subrayó.
También tuvo palabras de elogio para su delantero Armando González, al que describió como “una de las claves” de esta levantada rojiblanca: “Tiene muchos goles, ha hecho seis en el campeonato y eso no es fácil. Nos da tranquilidad tener un delantero con gol, pero tiene que seguir evolucionando. Es joven, tiene deseo y eso lo puede llevar muy lejos”.
El técnico cerró con una frase que bien podría ser su manifiesto de temporada: “Cada partido es una oportunidad para demostrar que somos un buen equipo. Tenemos que seguir creciendo, compitiendo igual, con la misma intensidad, con la misma claridad. Solo así vamos a llegar al objetivo que nos trazamos al inicio del campeonato”.
Chivas respira, pero Milito no se deja marear por la victoria. Su tono lo deja claro: el verdadero partido recién comienza.
ZZM