Los sueños se hacen realidad y para muestra de ello el gesto que tuvo la selección mexicana y el Chucky Lozano con una fanática de hueso colorado que deseaba poder ver jugar al conjunto azteca y conocer a los jugadores antes de perder la vista.
A través de redes sociales la cuenta oficial de la selección compartió la historia de esta aficionada de la escuadra tricolor que viajó 13 horas desde Alaska hasta Filadelfia para poder ver el duelo de México ante Alemania.
Lo que hace más especial la historia es que la señora no se pierde ni uno de los partidos de la selección y que su sueño más grande era poder ir a un partido y conocer a la selección pues debido a la diabetes que padece desde hace años la aficionada puede perder la vista.
La señora en compañía de su hija lograron realizar el largo viaje y llegar al Lincoln Financial Field para poder observar los entrenamientos de la selección mexicana previo al partido ante Alemania.
Además madre e hija pudieron convivir con los jugadores, especialmente con Lozano, pues la señora es fiel seguidora del trabajo de Chucky, incluso lo describió como "un jugador chiquito pero peleonero".
Pero no solo consiguió llevarse una fotografía con su jugador favorito sino que la señora pudo intercambiar algunas palabras con el delantero mexicano, dónde no desaprovechó para darle algunos consejos para el partido ante los teutones.
“Estos cabrón… me lo traen a chingazos, Chucky no te dejes, no te vayas a dejar eh; no dejen que se arrimen a la portería. Aunque te den tus chingazos, pero no te dejes”, dijo la aficionada.
Lozano por su parte le respondió que haría el mayor esfuerzo por sacar el partido y le dió un último abrazo a la señora además de una foto como recuerdo del día en que cumplió uno de sus mayores sueños.