Han pasado solo cuatro meses desde que Diego Cocca fue presentado como entrenador de la selección mexicana y ya afrontará uno de esos partidos que pueden marcar para bien o para mal su proceso. Las semifinales ante Estados Unidos, dentro de Liga de Naciones de Concacaf, representa un momento coyuntural para su aún muy joven gestión que, de superarlo exitosamente, puede darle la tranquilidad y la aceptación con la que no ha contado del todo, pero si no… entonces las voces que dudan de él, podrían aumentar.
El escenario lo exige y más por tratarse de Estados Unidos, una selección que en los últimos 23 años se encargó de voltear el dominio que el Tricolor tenía y ahora, con fuerzas muy niveladas, todo es de pronóstico reservado.
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El rival más complicado
Hubo una época en la que México volteaba poco hacia el norte para pelear el dominio de la Concacaf; con Costa Rica se dio el primer clásico de la zona, pero con el pasar de las décadas Estados Unidos creció a tal grado que hoy reclama para sí mismo el mando de la zona.
En el historial ya se contabilizan 75 partidos, desde 1934 a la fecha, en la que la selección mexicana se llevó la victoria en 36 ocasiones, por apenas 22 triunfos del conjunto de las barras y las estrellas, y 17 empates. Hasta ahí todo bien; sin embargo, todo cambia cuando se ve el desempeño de los últimos 23 años. Desde el 2000 se registran ya 33 juegos en los que Estados Unidos ganó 16 y México solo nueve, así como ocho igualadas.
Lo más alarmante es que en los últimos cuatro duelos oficiales, dos de la eliminatoria para Qatar 2022 y las Finales de Copa Oro y Liga de Naciones de 2021, el Tricolor no pudo ganar ningún partido al perder tres y empatar el restante. Y fue justo por la derrota en Liga de Naciones y Copa Oro que el proceso de Gerardo Martino entró en un bache del que no pudo salir, convirtiéndose en uno de los peores que se ha tenido en la historia reciente.
Con lo mejor que tienen
El duelo de esta noche pinta engañoso a todas luces por las realidades en la que se presentan ambos equipos. Si bien es cierto que México recién ha comenzado el proceso con Diego Cocca, obteniendo tres empates y dos triunfos en sus primeros cinco juegos, en Estados Unidos las aguas están totalmente revueltas al no tener un entrenador fijo, y confiar para este compromiso en el interinato de Brian Joseph Callaghan, quien hace 15 días sustituyó a Anthony Hudson, quien tampoco había recibido el nombramiento oficial.
Pese a ello, el conjunto estadunidense presume en su nómina hasta 18 elementos que militan en el futbol europeo (destacando la presencia de McKennie, Giovanni Reyna, Christian Pulisic y Tim Weah), de los 24 que fueron citados para este compromiso en la Liga de Naciones; en cambio, el conjunto mexicano apenas tiene 11 futbolistas en las Ligas europeas (encabezados por Santiago Giménez, Edson Álvarez, Orbelín Pineda y Guillermo Ochoa) dentro de los 23 que contempló Diego Cocca.
Sí, muy pronto en su proceso mundialista, Diego Cocca afronta la primera gran prueba de fuego: Estados Unidos. De este resultado dependerá la tranquilidad y turbulencia que pueda generarse para las próximas semanas donde llegará la Copa Oro.
MGC