En los últimos meses, la selección y el futbol mexicano ha sufrido de muchos con cambios. A raíz del fracaso en el Mundial, se decidió la llegada de Juan Carlos Rodríguez como Comisionado de la FMF. Dentro de las primeras decisiones que tomó fue la salida de Diego Cocca como entrenador nacional tras fracasar en la Liga de Naciones Concacaf en la que apenas terminó en la tercera posición, incluida la con goleada contra Estados Unidos.
En su lugar, llegó Jaime Lozano como interino, a unos días del arranque de la Copa Oro, pero al concluir su contrato la búsqueda del nuevo entrenador reinició.
Al respecto, el Comisionado de la FMF señaló que no será el encargado de elegir al nuevo estratega, pues sus funciones son otras.
“No, no me toca a mí, yo no voy a asignar al entrenador. Como Comisionado yo estoy en el negocio de generar estructuras, instituciones, procesos a largo plazo, mi chamba no es designar al entrenador de la selección mexicana”, confirmó Rodríguez.
El Comisionado recordó que su función principal es la de generar las condiciones necesarias para que quien sea designado como nuevo director técnico del Tricolor tenga las herramientas necesarias para llevar al conjunto azteca al siguiente nivel, sin esperar que los resultados aparezcan mágicamente.
“Llegó el momento de que el entrenador no sea un genio con una varita mágica, que le demos las llaves del reino y esperemos que todo funcione. Creemos que, para competir a nivel mundial, necesitamos crear una estructura. Queremos darle la vuelta completa al cómo reforzamos los procesos para quitar ‘varitas mágicas’”, aseguró.
Quién sí tomará la decisión es el presidente de la FMF, Ivar Sisniega, quien deberá encontrar al indicado para no haya excusas para los futbolistas y sólo se enfoque en ganar.
“Estamos mejorando la capacidad que los jugadores tienen para entrenar para que se acaben las excusas. Mi chamba es poner las estructuras, la de Ivar Sisniega es poner a la gente correcta y la de los jugadores es ganar”, finalizó.
DAO