Después del trago amargo por la final pérdida en la Liga de Naciones de la Concacaf, la Selección Mexicana comenzó su preparación ya de cara a la Copa Oro que iniciará dentro de un mes, y de la que es el campeón defensor. En un juego cerrado, el Tricolor empató sin goles frente a Honduras en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, Georgia, ante 70 mil 72 espectadores, la cifra más alta para un espectáculo deportivo en estos tiempos de pandemia.
Para este partido, Gerardo Martino paró un once muy distinto al que jugó en los partidos de la Liga de Naciones. Otra vez el técnico argentino apostó por una línea de tres zagueros, pero tal como le ha sucedido antes, no se vio la mejor versión del Tricolor.
En la portería apareció Rodolfo Cota; en la defensa formó con Héctor Moreno, Osvaldo Rodríguez y Edson Álvarez; adelante, por las bandas Jorge Sánchez y Gerardo Arteaga; en la contención Carlos Rodríguez y Luis Romo; adelante, el tridente seleccionado fue Jesús Manuel Corona, Orbelín Pineda y Alan Pulido como centro delantero.
El juego inició con buen ritmo por parte de ambos equipos, pero conforme fue transcurriendo el tiempo las llegadas escasearon. Al minuto 11 Honduras fue el primero en tocar con peligro la puerta mexicana, cuando Jorge Benguché se plantó mano a mano con Rodolfo Cota; el portero salió y aguantó el disparo del catracho para mandar a tiro de esquina.
México respondió unos minutos después con un pase de Edson Álvarez justo a la llegada de Orbelín Pineda al área; el futbolista de Cruz Azul no pudo impactar de buena manera debido a la salida del portero Luis López.
El partido se mantenía nivelado, con algunas opciones de peligro, como la que tuvo la Selección después de una serie de pases en la que Edson habilitó a Orbelín en el área, éste retrasó para Carlos Rodríguez, quien sacó un tiro bombeado que se fue a estrellar al travesaño.
En los últimos instantes del primer tiempo, Honduras apretó con un disparo que Cota atajó mal y por poco lo sorprende, pero el marcador no se movió y con el empate sin goles se fueron ambos equipos a los vestidores.
Para el segundo tiempo, Martino sacó a Jesús Manuel Corona y le dio ingreso a Diego Lainez. El partido entró en un ritmo semilento, con mucha pelea en el mediocampo y poca claridad. Por esa misma razón, el Tata mandó otros dos movimientos, dándole la alternativa a Henry Martín por Pulido y Uriel Antuna por Orbelín.
El juego no mejoró para nada. Ninguno de los dos equipos se acercó con peligro, los revulsivos de Martino no funcionaron y otra vez quedó evidenciada la falta de creación y contundencia que impera en el conjunto mexicano.
En los últimos minutos el Tricolor se animó; Antuna tuvo un cabezazo completamente solo en el área, pero erró en su remate. Fue lo más claro que tuvo la Selección en el segundo tiempo. Así concluyó este partido de preparación.