El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, destituyó este lunes al presidente de Petrobras, José Mauro Coelho, tras solo 40 días en el cargo, en medio de la incesante presión por los aumentos del precio de los combustibles.
"El gobierno Federal, como accionista controlador de Petroleo Brasileño S.A, Petrobras, avisa que decidió promover la alteración de la presidencia de la Empresa", dice una nota del ministerio de Minas y Energía.
Sin dar las razones específicas del cese, el gobierno agradeció a Coelho por su gestión pero indicó que "Brasil vive actualmente un momento desafiante, debido a los efectos de la extrema volatilidad de los hidrocarburos en los mercados internacionales", indica el comunicado.
Coelho, el tercer presidente de Petrobras durante la gestión de Bolsonaro, había sido designado en abril por un año, completando el ciclo de su predecesor Joaquim Silva e Luna.
Como nuevo presidente, el gobierno propuso a Caio Mário Paes de Andrade, actual secretario de Desburocratización del ministerio de Economía, quien aún debe ser aprobado por el consejo de administración de la compañía.
Los dos líderes anteriores de Petrobras, Silva e Luna y Roberto Castello Branco, también fueron destituidos tras críticas de Bolsonaro a las subidas en los precios de los combustibles por parte de la compañía que controla el mercado local.
Andrade posee una licenciatura en comunicación social de la Universidad Paulista, un posgrado en administración y gestión por la Universidad de Harvard y una maestría en administración de empresas por la Universidad de Duke, informó el ministerio.
"El nominado cuenta con todas las calificaciones para llevar a la Compañía a superar los desafíos que impone la presente coyuntura(...) sin descuidar las responsabilidades de gobierno, medio ambiente y, en especial, social de Petrobras", dice el texto.
Un lucro "abusivo", según Bolsonaro
Las constantes subidas de precios en los combustibles, que foguean particularmente la inflación, preocupan a Bolsonaro, quien buscará la reelección en los comicios de octubre.
Coelho asumió la conducción de Petrobras el 14 en abril y aseguró que no habría cambios en su política de precios, que sigue la cotización internacional del crudo, disparada en los últimos meses por la guerra entre Rusia y Ucrania.
El 11 de este mes, Bolsonaro cambió al ministro de Minas y Energía Bento Albuquerque luego de que Petrobras implementara un nuevo aumento del diésel (8.8 por ciento). Sin embargo, esa cartera no tiene incidencia directa en las decisiones de la compañía autónoma.
Días antes, el mandatario había arremetido, como lo hace habitualmente, contra la petrolera, diciendo que sus ganancias eran "una violación", tras la publicación de abultados resultados trimestrales.
Bolsonaro pidió desde las redes sociales al entonces ministro y a Coelho que no aumentaran los precios de los combustibles porque considerar "abusivo" el lucro de la empresa. Antes de presidir Petrobras, Coelho estaba vinculado al Ministerio de Minas y Energía.
Petrobras reportó un lucro neto de 44 mil 561 millones de reales (8 mil 605 millones de dólares) entre enero y marzo de este año, lo que supone unas 38 veces lo obtenido en el primer trimestre de 2021.
El economista André Perfeito, de la consultora Necton, inidicó en una nota que, dado el perfil de Andrade, "no parece razonable suponer que la política de precios de Petrobras cambiará, sino todo lo contrario", y aseguró que con este nuevo cambio el ministerio de Economía tendrá "más control que nunca sobre la petrolera".
"Bajo la dirección del nuevo Ministro de Minas y Energía, Adolfo Sachsida, se iniciaron los estudios para la privatización de la empresa y probablemente deberíamos ver el apoyo del nuevo presidente en este sentido", agregó el analista, quien asegura que el mercado aprobará el cambio porque "Andrade es un profesional ligado a los valores liberales y cercano al ministro Paulo Guedes".
RM