El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció que respetará los derechos de defensa de los bolsonaristas involucrados en los disturbios de Brasilia, pero que estos serán sancionados.
Pese no haber cifras exactas, medio español El Mundo reportó la detención de al menos mil 500 bolsonaristas relacionados con los disturbios del pasado domingo.
Los manifestantes, entre los que destaca un campamento de bolsonarista ubicado frente un cuartel general del ejército de Brasil, pedían la intervención de las fuerzas armadas para desconocer el gobierno de Lula da Silva.
El presidente de Brasil compartió su decisión tras recibir al presidente de la Cámara, Arthur Lira, y al presidente interino del Senado, Veneziano Vital do Rêgo, en el Palacio del Planalto donde se entregó el decreto de intervención en seguridad del Distrito Federal.
La petición de una intervención federal fue solicitada por Lula da Silva desde el domingo, durante los ataques a las principales sedes gubernamentales del país, pero el fue aceptada el pasado lunes por el Congreso por unanimidad.
Finalmente, Lula da silva criticó nuevamente la decisión de no aceptar el resultado electoral por parte del ex presidente Jair Bolsonaroquien también condenó los ataques de sus simpatizantes.
aag