Las previsiones contemplaban un segundo día de fuertes vientos el martes en el sur de California, donde los bomberos seguían en alerta y las condiciones meteorológicas extremas aumentaban el riesgo de nuevos incendios forestales dos semanas después del inicio de dos grandes fuegos que seguían activos en la zona de Los Ángeles.
Se esperaban rachas de viento de hasta 113 kilómetros/hora en la costa y de 160 km/h en las montañas y colinas durante un episodio de clima extremo que se espera que se mantenga el martes por la mañana.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió una advertencia de “situación particularmente peligrosa” para parte de los condados de Los Ángeles, Ventura y San Diego entre la tarde del lunes y la mañana del martes debido a la baja humedad y los peligrosos vientos de Santa Ana.
“Las condiciones son propicias para un crecimiento explosivo del fuego en caso de que comience un incendio”, dijo Andrew Rorke, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Oxnard.
El lunes, los equipos de bomberos de Los Ángeles extinguieron rápidamente un pequeño incendio de matorrales declarado al sur del icónico Observatorio Griffith. Las autoridades detuvieron a un hombre sospechoso de provocar las llamas, indicó David Cuellar, portavoz del Departamento de Policía de Los Ángeles.
Así quedó Los Ángeles:
Los bomberos también sofocaron rápidamente un incendio similar al pie de la Interestatal 405, en el barrio de Granada Hills, que cerró temporalmente los carriles en dirección norte.
Más al sur, los bomberos lucharon contra un incendio que también se inició el lunes por la tarde en la ciudad de Poway, en el condado de San Diego, y frenaron su avance.
La ex vicepresidenta Kamala Harris y su esposo, Doug Emhoff, volaron a Los Ángeles después de asistir a la toma de posesión del presidente Donald Trump y se reunieron con bomberos, voluntarios y víctimas del incendio Eaton en Altadena.
“Vinimos para dar las gracias (a los bomberos), agradecer a la comunidad y simplemente recordar a la gente que estamos juntos en esto”, dijo Harris, que añadió que su casa en Pacific Palisades seguía en pie.
Así quedó California:
Trump, quien criticó la respuesta a los incendios forestales durante su discurso inaugural, anunció que viajará a Los Ángeles el viernes.
El gobernador de California, Gavin Newsom, afirmó el lunes que la devastación causada por el fuego subraya la necesidad de una colaboración entre los gobiernos estatal y federal.
“Espero con interés la visita del presidente Trump a Los Ángeles y su movilización de todo el peso del gobierno federal para ayudar a nuestros compatriotas a recuperarse y reconstruir”, señaló Newsom en un comunicado.
Para el fin de semana se prevén algunas lluvias en el área de Los Ángeles, aunque se espera que el jueves haya más vientos racheados, dijo Rorke.
Las autoridades instaron a la población a no cortar el césped para evitar provocar incendios y a no iniciar ningún fuego que pudiera descontrolarse. También se pidió a los residentes que revisen sus planes de evacuación y prepararen kits de emergencia, además de estar atentos a cualquier nuevo foco y reportarlo de inmediato.
La combinación de baja humedad, vegetación extremadamente seca y los fuertes vientos de Santa Ana llega mientras los bomberos siguen luchando contra dos grandes incendios en el área de Los Ángeles, los de Palisades y Eaton, que han destruido más de 14 mil estructuras desde que comenzaron el 7 de enero. El de Palisades estaba contenido en 59 por ciento el lunes y el de Eaton en 87 por ciento, según los bomberos.
SNGZ