El cardenal italiano, Giovanni Battista Re, justificó la excomunión de la madre de una niña brasileña de nueve años y a los médicos que ayudaron a la menor a abortar, después de que fue violada por su padrastro.
Pese a que el aborto en Brasil es legal en caso de violación o debido a que esté en peligro la vida de la madera, el cardenal expresó su condena hacia este acto, al declarar que “la violación es menos grave que el aborto, siempre se debe proteger la vida.”
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De igual manera, dijo, “este es un caso triste, pero el verdadero problema es que los futuros gemelos eran inocentes que tenían derecho a vivir. La excomunión para los que han inducido el aborto es simplemente porque esta operación significa la supresión de una vida inocente”.
Estas declaraciones ocasionaron la indignación de la sociedad brasileña, pues pese a que los médicos que realizaron esta operación fueron excomulgados, el padrastro de la víctima no recibió ningún castigo por parte de la institución eclesiástica.
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