El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) desplazó al cártel de Sinaloa tras la caída de Joaquín, El Chapo Guzmán y a los Guerreros Unidos en el control de la tercera ciudad más grande de Estados Unidos: Chicago, que por su importancia poblacional y comercial en el noreste estadunidense, hoy se ha convertido en el centro logístico de la organización criminal que dirige Nemesio Oseguera, El Mencho.
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De acuerdo con el informe elaborado por la División de Campo de la Administración de Control de Drogas (DEA) en Chicago, los cárteles de la droga mexicanos representan "la mayor amenaza" para esta agencia gubernamental y es el CJNG la agrupación que mayor incremento en su poder e influencia ha tenido en los últimos dos años.
El informe detalla que los grupos criminales mexicanos trafican principalmente heroína, cocaína y metanfetamina, así como el fentanilo con una pureza inferior al 10 por ciento.
Además, los cárteles mexicanos como el de Jalisco Nueva Generación, Guerreros Unidos, del Golfo, de Sinaloa y el de los hermanos Beltrán Leyva, emplean una serie de intermediarios para supervisar el envío de drogas a través de la frontera sur del país y así facilitar las ventas a clientes mayoristas y de nivel medio en los principales centros de distribución ubicados en todo el territorio norteamericano.
Los intermediarios clave se establecen generalmente en Estados Unidos pero mantienen relaciones cercanas con familiares o socios criminales en México.
De acuerdo con la DEA, dichas personas son críticas en las operaciones del cártel, tanto por su capacidad de negociar tratos de drogas, como de coordinar las operaciones de contrabando y para ayudar a aislar a los miembros del cártel de alto nivel en México asumiendo gran parte del riesgo, evitando así que la autoridad logre su contención.
El informe detalla que el fentanilo que llega de China, a menudo se compra por internet y es enviado por correo postal, mientras que el que producen los cárteles mexicanos es enviado de contrabando desde la frontera.
Drogas atacan más a ciudades grandes
Reconoce que la disponibilidad y el abuso de estas drogas es alta y los opioides se consumen principalmente en las ciudades, en tanto que en las zona rurales se recurre a las metanfetaminas.
La DEA destacó que el gran volumen de comercio legítimo y la vasta infraestructura del área de Chicago, incluida una extensa autopista, así como las redes de trenes y transporte aéreo, junto con cientos de almacenes e instalaciones, hacen de esa ciudad uno de los centros de tráfico de drogas más importantes del país.
Las drogas se transfieren de México a Estados Unidos a través de una amplia gama de medios de transporte, especialmente tractores, autobuses comerciales, y vehículos personales.
La ciudad de Chicago también sirve como un importante punto de recolección, que generalmente se introducen de contrabando de vuelta hacia la frontera sur a México a granel, o, en ocasiones, es lavado por las mismas organizaciones criminales.
Hasta 2015, cuando Guerreros Unidos y Los Rojos se señalaban como responsables de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero estaba en el centro de la distribución de los narcóticos en Chicago, a través de distintas rutas de transporte desde México hacia ese punto neurálgico en Estados Unidos, pero su poderío se vio sustituido por el CJNG que también en México se ha expandido.
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