La Corte Internacional de Justicia rechazó las medidas cautelares contra Ecuador solicitadas por México para salvaguardar los inmuebles diplomáticos, sus bienes y archivos en Quito después del asalto a la Emabajada el pasado 5 de abril al considerar que no conllevan carácter de urgente.
El presidente de la corte, Nawal Salam, leyó ante las dos delegaciones presentes el veredicto de los 15 jueces que deliberaron durante dos semanas que las medidas no son tales que requieran el ejercicio de poder bajo el artículo 41 del estatuto.
La decisión de los magistrados parte de la declaración del Embajador de Ecuador en los Países Bajos, Andrés Terán Parral, en la que aseguraba que hasta en dos ocasiones se le ofreció a México salvaguardar las instituciones diplomáticas, sus bienes y archivos, por lo que veía inapropiadas, injustificadas e insostenibles las medidas cautelares solicitadas.
No obstante, la corte consideró necesario enfatizar en los principios fundamentales consagrados en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
“Tenemos una segunda victoria que es que la Corte manifieste y reconozca que la inviolabilidad de una embajada es un factor esencial en las relaciones diplomáticas, en las relaciones entre países. Esto significa que México, hoy en día tienen un compromiso de Ecuador ante la Corte, sancionado por la Corte de no ingresar a nuestra embajada y tenemos el reconocimiento de la Corte que la inviolabilidad de las embajadas es un principio absoluto que no invita a excepciones como lo invita Ecuador” declaró Alejandro Celorio al termino de la resolución y aseguró que “México obtiene dos victorias ante la CIJ” por lo que estan “muy satisfechos” a pesar del fallo de la corte.
México tuvo dos victorias, asegura SRE:
Celorio aclaró que “asumían que la corte iba darle peso a las garantías” que Ecuador expuso en la audiencia del 1 de Mayo. “Hay que señalar que la Corte es una corte de derecho, establece que no hay urgencia para establecer las medidas provisionales” aunque señaló que “una de las juezas de la corte, en una opinión individual” expresó “que las garantías ofrecidas por Ecuador no son suficientes, que se debieron dar análisis a todas las circunstancias presentadas por México. De una u otra forma sentimos que si llegara ha haber, de nueva cuenta una violación a la Embajada con medidas provisionales o con el compromiso unilateral hecho por Ecuador que es jurídicamente vinculante, México tiene garantías para exigir su cumplimiento”.
Primeras reacciones tras la audiencia:
¿Qué sigue para México?
A la espera de que la demanda interpuesta por México hacia Ecuador avance en el procedimiento que tardará “un año, año y medio” ya que “todavía falta la presentación de escritos por parte de México y la contestación de Ecuador”.
Mientras tanto, el gobierno trabaja con distintos países para que “cautele nuestros intereses en Ecuador” explica Alejandro Celorio desde la CIJ. “Una vez teniendo este tercer país que sea nuestro vínculo diplomático con Ecuador podremos proceder al cierre de nuestra embajada, a retirar los documentos, los archivos y sobre todo las pertenencias de nuestro personal diplomático. Dado esto pasaremos a una segunda etapa únicamente para que este tercer país vele por los intereses de nuestro país en Ecuador”, recalcó.
El país sudamericano sigue el mismo proceso de la mano de Perú, que será el país mediador por parte del gobierno de Daniel Noboa. El presidente ecuatoriano, de gira por Europa, declaró que no descarta reestablecer las relaciones con México, palabras que ratificó el Embajador de Ecuador en los Países Bajos, Andrés Terán Parra y que México siguió de cerca.
“Hemos dado seguimiento a las declaraciones del presidente. Nos llama mucho la atención que en su visita a Francia, el presidente Macron le recuerde a Ecuador respetar las disposiciones de la Convención de Viena sobre las relaciones diplomáticas” apuntó Celorio quien también aclaró que lo dicho por Noboa sobre la condición de México para reestablecer lazos, que no era otra más que la entrega de Jorge Glas, ex vicepresidente ecuatoriano.
“Dentro de muchas cosas que solicitamos, la principal es una disculpa pública. Es lo que estamos solicitando ante la corte. Necesitamos de Ecuador un reconocimiento de la violación flagrante al Derecho Internacional que de alguna manera ya lo hacen ahora al comprometerse a no volverlo a hacer. Respecto al Sr. Glas, es una discusión que se está llevando internamente en México y habrá desarrollos después” concluyó.
¿Cómo inició el proceso en La Haya?
México inició procedimientos ante la CIJ el 11 de abril argumentando la existencia de una disputa centrada en “cuestiones legales sobre la resolución de disputas internacionales por medios pacíficos y relaciones diplomáticas y la inviolabilidad de una misión diplomática”, pero, antes de entrar a deliberar en el caso, México consideró necesario que la CIJ emita medidas cautelares.
Entre ellas, solicitó exigir a Quito “tomar medidas apropiadas e inmediatas para proporcionar plena protección y seguridad de las instalaciones diplomáticas, su propiedad y archivos, previniendo cualquier forma de intrusión contra ellas”, y que “despeje” los edificios diplomáticos y la residencia privada de los agentes diplomáticos mexicanos en Ecuador.
En respuesta a esta solicitud, la CIJ celebró el 30 de abril y 1 de mayo audiencias públicas para escuchar los argumentos de ambos países. El gobierno de México acusó entonces a Ecuador de “cruzar líneas que no se deben cruzar en el derecho internacional” y de crear “un precedente desconcertante que reverbera en toda la comunidad internacional”.
Además, acusó a Quito de “negligencia deliberada” hacia las vidas de las personas que estaban en el recinto y señaló que esta incursión “muestra claramente la falta de respeto de Ecuador hacia las normas fundamentales, aceptadas universalmente y que existen desde hace tiempo”.
En su turno de palabra, Ecuador defendió que el asalto a la embajada mexicana fue un acto “excepcional” y subrayó que el político ecuatoriano ha sido “debidamente condenado” por delitos relacionados con corrupción. Además, enfatizó que Quito ha dado “garantías” por escrito a México de que cumplirá con su deber de respetar y proteger a su personal y sedes diplomáticas.
“México utilizó erróneamente durante meses su sede diplomática en Quito para dar refugio a un criminal común que ha sido debidamente condenado en dos ocasiones por los más altos tribunales de Ecuador de graves delitos relacionados con la corrupción”, defendió el embajador de Ecuador ante Países Bajos, Andrés Terán.
Sobre el ex vicepresidente Glas pesaba una orden de detención por malversación de fondos públicos e ingreso en prisión preventiva por caso de obras de reconstrucción tras el fuerte terremoto ocurrido en 2016.
Con información de EFE, AFP y Reuters.
SNGZ