Un tribunal ruso ordenó el ingreso en prisión de un hombre durante 10 días por escribir con el dedo "No a la guerra" en un torniquete cubierto de nieve a la entrada de una pista de patinaje sobre hielo del parque Gorki de Moscú.
Según los documentos judiciales, el incidente ocurrió el 23 de noviembre y el hombre, llamado Dmitry Fyodorov, fue condenado al día siguiente tras ser detenido por la policía.
La policía decidió que sus acciones podían constituir un delito civil en virtud de una ley que persigue a cualquiera que se considere que ha actuado públicamente para desacreditar a las fuerzas armadas rusas, un delito que en su caso se castigaba con una multa.
Las nuevas leyes que reprimen la disidencia se introdujeron poco después de que el presidente Vladimir Putin envió decenas de miles de tropas a Ucrania en febrero de 2022, en lo que denominó una "operación militar especial".
Para quienes se oponen a la guerra de Rusia en Ucrania, hablar en público se ha convertido desde entonces en algo arriesgado, y los críticos afirman que casi 20 mil personas han sido detenidas y se han abierto más de 800 causas penales.
Fyodorov, que admitió ante el tribunal que había escrito el lema contra la guerra, fue condenado a diez días de cárcel por desobedecer a la policía y negarse presuntamente a acudir a una comisaría, algo que él negó, según los documentos judiciales.
También se le impuso una multa de monto desconocido -al parecer por escribir "No a la guerra", informaron medios de comunicación rusos, aunque no se menciona en los documentos judiciales publicados en Internet.
Las autoridades afirman que es necesaria la máxima unidad en un momento en el que Rusia está inmersa en lo que Putin -que se espera que se presente a otro mandato de seis años el año que viene- ha descrito como una batalla existencial contra Occidente.
A principios de este mes, un tribunal de San Petersburgo encarceló durante siete años a una artista que sustituyó las etiquetas de los precios de los supermercados por mensajes pidiendo el fin de la guerra en Ucrania, un veredicto que sus partidarios calificaron de vergonzosa burla a la justicia.
RARR