Conflicto entre Israel y Hamás: fake news que se han generado durante la guerra

Más que ofrecer conclusiones, las secuencias de afirmaciones y desmentidos permiten observar cómo enredos fortuitos –como el de los bebés– y otros que quizás no son casuales.

La guerra mediática en Israel y Gaza: Las noticias falsas se apoderan del conflicto | Óscar Ávila
Israel /

¿Realmente encontraron a 40 bebés decapitados por hombres de la milicia Hamás en el kibbutz Kfar Azar, que atacó el 7 de octubre? ¿Quién provocó la explosión que destruyó el hospital Al Ahly, en la ciudad de Gaza?

Estas dos preguntas, que mucha gente responde dependiendo de con quién simpatiza en este conflicto, son las dos más acuciantes de las muchas que ha generado esta guerra, que como las demás también se pelea con andanadas de mensajes verdaderos, medio ciertos y falsos, con el propósito de influir en la percepción pública para ganar la batalla de las narrativas.

La cadena CBS reportó que, de más de mil videos que recibió de gente que supuestamente se encuentra en la zona de conflicto en Israel y en Gaza, solo un 10 por ciento es utilizable. 

Muchos de las 900 piezas rechazadas fueron producidas con inteligencia artificial, para simular situaciones que nunca ocurrieron. Otros corresponden a hechos de otros años y lugares.

La cadena CBS reportó que recibió más de mil video (Foto:EFE/ Mohammed Saber)

Más que ofrecer conclusiones, las secuencias de afirmaciones y desmentidos permiten observar cómo enredos fortuitos –como el de los bebés– y otros que quizás no son casuales –como el del hospital– se convierten en combates mediáticos en los que las partes ofrecen tantos elementos como tienen a la mano para establecer su versión como la verdad popularmente aceptada.

El misterio de los 40 bebés

El 10 de octubre, tres días después de la ofensiva de Hamás, la tragedia de las víctimas israelíes empezaba a perder peso en los ciclos noticiosos y lo empezaba a ganar el drama de las víctimas de los bombardeos en Gaza.

Esa mañana, la reportera Nicole Zedeck, del canal i24News, declaró frente a cámara que “he hablado con algunos de los soldados y me dicen que lo que han visto al entrar en las casas ha sido a bebés con la cabeza cortada”. 

La autoría "Anónima" del ataque | Infográfico

Después, el video de la nota fue compartido en la cuenta del Ministerio de Relaciones Exteriores Israel con una descripción que añadía un número: “40 bebés decapitados”.

La historia, que no había sido verificada por nadie, corrió de inmediato por el mundo y volvió a darle relevancia prioritaria al lado israelí de los hechos.

Periodistas de la agencia turca Anadolu, del diario francés Libération y de la cadena estadunidense CNN, cada cual por su cuenta, se pusieron en contacto con los voceros del Ejército, que respondieron que “hemos visto las noticias, pero no contamos con detalles o confirmación sobre ellas”. 

Otros informadores que habían estado en el kibbutz al mismo tiempo que Zedeck expresaron su extrañeza: “Nadie me habló de decapitaciones, aún menos de niños decapitados, aún menos de 40 niños decapitados”, dijo Samuel Forey, de Le Monde. 

El periodista israelí Oren Ziv afirmó no haber visto pruebas ni oído nada parecido de los mandos militares y soldados con los que habló.

Los bebés asesinados que nadie vio | Infográfico

Después se supo que el oficial que le dio esa declaración a la reportera fue David Ben Zion, vicepresidente de una asociación de colonos de los asentamientos israelíes en territorio palestino, que ha llamado a destruir comunidades árabes.

Aun así, influyentes medios occidentales dieron por verídica la versión, como los británicos The Times (“Hamás 'cortó la garganta a bebés' en una masacre”) y Daily Telegraph (“Matanza de bebés y niños por Hamás”) y el español ABC (“Hallan cadáveres de bebés asesinados en el kibutz de Kfar Aza”).

Y en Washington, el presidente Joe Biden expresó su “furia”y dijo que nunca pensó que "vería o tendría imágenes confirmadas de terroristas decapitando niños".

Minutos después, la oficina de prensa de la Casa Blanca corrigió al mandatario, al reconocer en un comunicado que ni él ni funcionarios estadunidenses habían visto dichas imágenes.

Pero mucha gente dio por cierta la versión e incluso fue utilizada para acusar a gobiernos y políticos de complicidad con el terrorismo.

Explosión sin autor

Una semana más tarde, el martes 17 de octubre, a las 19:20 horas, se produjo un gran estallido en un hospital de la ciudad de Gaza, atestado de gente. Inicialmente se reportaron 500 muertos y miles de heridos, incluyendo mujeres y niños.

Veinte minutos después, Hananya Naftali, asesor de redes sociales del primer ministro Netanyahu, tuiteó: "La fuerza aérea israelí golpeó una base terrorista de Hamás dentro de un hospital de Gaza. Múltiples terroristas están muertos".

Un palestino en pleno conflicto en Israel | Reuters

A las 21:04 horas, sin embargo, el Ejército israelí publicó un tuit con una versión muy distinta. Incluía un video en el que, aseguraba, se aprecia que desde Gaza disparan una serie de cohetes y que uno de ellos falla, da una vuelta, cae a tierra y provoca una explosión. Indicaba que eso era el hospital y acusaba a la milicia Yijad Islámica.

Pero Aric Toler, un periodista del New York Times, hizo notar que la hora registrada en las imágenes es posterior a la explosión. El Ejército respondió de inmediato, editando el tuit para eliminar el video y adjudicando la información simplemente a “varias fuentes que tenemos”.

A las 22:58 de la noche, el asesor Naftali publicó un tweet para admitir que había borrado el anterior y justificarse: "Por error, compartí esta información en un post ya borrado en el que hacía referencia a la rutina de Hamás de usar hospitales para almacenar armas y llevar a cabo actividades terroristas. Me disculpo por el error. Ya que el ejército no bombardea hospitales, asumí que el objetivo era una de las bases de Hamás en Gaza".
Verdad y mentira en el conflicto Israel-Hamás: El papel de las noticias falsas | Óscar Ávila

En realidad, sí los ha bombardeado. La Organización Mundial de la Salud reaccionó con un comunicado en el denuncia que, desde el 7 de octubre, 115 instalaciones de salud han sido atacadas en los territorios palestinos, de las que 51 están en Gaza; y que han matado a 15 trabajadores de la salud y herido a 27. 

Su representante regional, Richard Peeperkorn, declaró que los habitantes de Gaza “van a estos hospitales porque esperan que sean lugares seguros. Ahora ya ni siquiera un hospital es un lugar seguro”.

Luego, el Ejército presentó otro video y además un audio de una supuesta conversación entre miembros de Hamás, en la que uno de ellos le dice al otro que el cohete fallido fue disparado por su organización.

Expertos y observadores se confrontaron en la red social X difundiendo diversos análisis para contradecir otros análisis. Unos explicaron que las milicias palestinas no disponen en sus arsenales de ninguna clase de arma capaz de matar a 500 personas y que, en más de 20 años de disparos desde Gaza, ni un solo cohete ha llegado a provocar más de cinco víctimas.

Señalaron, además, que los hombres de Hamás están conscientes de que la inteligencia israelí monitorea todas sus comunicaciones y resulta improbable que discutieran por teléfono su propia responsabilidad en un incidente tan grave. 

Earshot, una organización dedicada al análisis de audio, encontró que “las voces están divididas en dos canales” porque “fueron grabadas por separado. 

Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, con el Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu | Reuters

Cuando las llamadas son interceptadas, producen grabaciones monofónicas” por lo que esto “no es una fuente de evidencia creíble”.

Mediante comparaciones de sonido de videos de la explosión y de otros eventos, otros concluyeron que se trataba de un misil JDAM del ejército israelí y se burlaron de la improbable vuelta del supuesto cohete palestino.

Unos más sostuvieron que el cráter del estallido no es consistente con los que crea el de un JDAM (un análisis del británico Channel 4 concluyó que “esto hace improbable que sea una munición israelí detonante en el suelo pero no descarta una munición que estalla en el aire”), difundieron otros videos de lo que dijeron que es el disparo nocturno de cohetes momentos antes de la explosión, con un flash que, en su interpretación, muestra que uno de los proyectiles se desvía (la cadena Al Jazeera afirma que lo que en realidad se ve es su intercepción por un cohete de la defensa israelí), y atribuyeron a fuentes de inteligencia la confirmación de que el incidente fue producto de un fallo palestino.

Credibilidad en duda

“La credibilidad del ejército israelí es bastante menos que perfecta”, cuestionó un periodista al vocero del Ejército, en una conferencia de prensa. Como ejemplo, le recordó el caso de la reportera Shireen Abu Akleh, que fue asesinada en Cisjordania por un soldado israelí

Los militares lo negaron durante meses, atribuyendo el crimen a pistoleros palestinos, hasta que una investigación de la ONU y otra de Estados Unidos confirmaron que el disparo sí provino de las fuerzas israelíes.

El comunicador le preguntó porqué el mundo debería confiar ahora en la versión del Ejército sobre la explosión del hospital. Con sonrisas nerviosas, el portavoz militar respondió:

 “En el pasado hemos sido rápidos en llegar a conclusiones. Por eso esta vez nos tomamos el tiempo, más de cinco horas, para verificar”.

Más allá de las evidencias y de las discusiones, el presidente Biden, de visita en Israel, volvió a darle validez a la versión del gobierno de Netanyahu al decirle al primer ministro que estaba “triste e indignado” por la matanza y que “con base en lo que he visto, parece que esto fue hecho por el otro equipo, no ustedes”.

HCM


  • Témoris Grecko
  • Periodista, documentalista y analista político que ha cubierto conflictos sociales y armados en 95 países y territorios, publicado siete libros y escrito cinco documentales.

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.