La Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), entidad vinculada al Ministerio de Salud de Brasil, lanzó una campaña de prevención contra el covid-19 en diferentes favelas de Río de Janeiro, un día después de que el gobierno admitiera que negocia con narcos para poder actuar en estas barriadas.
La fundación, principal centro de investigación en salud de América Latina, explicó que promueve su campaña multimedia en las favelas en asociación con organizaciones no gubernamentales que actúan en Maré, un extenso conjunto de barriadas pobres en la zona norte de Río de Janeiro y Manguinhos, una favela en la que ya se registraron dos muertes por coronavirus.
"La iniciativa permitirá la divulgación de informaciones confiables adaptadas al contexto de las periferias en diversos formatos, como radionovelas, mensajes transmitidos en parlantes, carteleras y piezas y videos para redes sociales", explicó la entidad en un comunicado.
La campaña fue lanzada un día después de que el propio ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, admitiera que representantes de la cartera negociaron con grupos criminales que controlan las favelas para poder poner en marcha un plan piloto para intentar frenar el avance del covid-19 en estas comunidades.
Mandetta dijo que no revelaría ni la favela ni la ciudad en la que el Ministerio de Salud está trabajando, pero las barriadas de Río de Janeiro son precisamente las que más sufren con el dominio de grupos criminales, principalmente de narcotraficantes pero también de milicianos, como son conocidas las bandas parapoliciales.
La Fiocruz tampoco aclaró si su campaña de prevención era la citada por el ministro.
"Hoy pusimos en marcha el primer plan de manejo y no voy a decir en cuál comunidad, porque tenemos que entender la cultura y la dinámica de esas barriadas. Entender que son áreas en donde muchas veces el Estado está ausente y que quien manda allí es el narcotráfico o la milicia", admitió el ministro en una rueda de prensa que concedió el miércoles.
El gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, un ex fusilero naval y defensor de una política de mano dura con la criminalidad, afirmó que desconoce -y no fue informado- si la iniciativa promovida por el Ministerio de Salud es en alguna favela de este estado.
"Desconozco ese diálogo con narcotráfico y milicia. Voy a preguntarle al secretario de Salud. A mí no me consultaron nada", afirmó Witzel en una entrevista a una radio local.
En marzo habitantes de algunas favelas de Río confirmaron que las bandas de narcotraficantes y de milicianos habían "decretado" toque de queda en las noches en las barriadas que controlan para evitar la propagación del covid-19.
Una de las principales preocupaciones de las autoridades de Río es la posible expansión del coronavirus en las favelas, comunidades de estrechas calles y pequeñas viviendas, donde prevalece el hacinamiento y que carecen de servicios esenciales como el agua.
ledz