Bajo un cielo despejado, unos 20.000 cazadores de eclipses vieron el jueves un inusual eclipse solar que sumió parte de la coste noroeste de Australia en una breve oscuridad en pleno día e hizo bajar las temperaturas.
La remota localidad turística de Exmouth, con menos de 3.000 habitantes, se había promocionado como uno de los mejores lugares en Australia para ver el eclipse, que también se produjo sobre zonas remotas de Indonesia y Timor Oriental.
Una multitud internacional llevaba reuniéndose durante días en carpas de acampada y casas rodantes en una llanura roja y polvorienta a las afueras del pueblo, con cámaras y otros equipos apuntando al cielo.
Entre las personas que vitoreaban en la oscuridad en Exmouth estaba Henry Throop, astrónomo de la NASA.
“¿No es increíble? Esto es fantástico. Fue alucinante. Fue muy nítido y muy brillante. Se podía ver la corona en torno al sol”, dijo el residente en Washington, visiblemente emocionado.
“Sólo dura un minuto, pero pareció mucho tiempo. No se puede ver otra cosa así. Simplemente fue increíble. Espectacular. Y entonces se podía ver Júpiter y Mercurio y poder verlos al mismo tiempo durante el día, simplemente ver Mercurio ya es bastante raro. De modo que fue simplemente increíble”, añadió Throop.
Julie Copson, que recorrió más de 1.000 kilómetros desde la ciudad portuaria de Fremantle, en la costa oeste de Australia, hasta Exmouth, dijo que el fenómeno le había dejado los pelos de punta.
“Me siento muy emocionada, como que podría llorar. El color cambió, y ver la corona y las fulguraciones solares...”, comentó.
“Fue muy fuerte y la temperatura bajó muchísimo”, añadió, refiriéndose al repentino descenso de 5 grados Celsius (9 grados Fahrenheit) en la temperatura cuando al sombra de la Luna cubrió la región.
En la capital indonesia, cientos de personas acudieron al planetario de Yakarta para ver el eclipse parcial, oscurecido por las nubes.
Azka Azzahra, de 21 años, llegó con su hermana y sus amigos para verlo más de cerca utilizando los telescopios, al igual que otros cientos de visitantes.
“Aunque esté nublado, estoy contenta de haber venido. Da felicidad ver cómo la gente viene con mucho entusiasmo a ver el eclipse, porque es raro", dijo Azzahra.
En las mezquitas de la ciudad se oía la llamada a la oración cuando comenzó la fase de eclipse, y los musulmanes expresaron oraciones a la grandeza de Dios.
El eclipse solar híbrido se vio desde el Océano Índico al Océano Pacífico, en su mayor parte sobre el agua. Los pocos afortunados en su ruta o bien vieron la oscuridad de un eclipse total o el “anillo de fuego” cuando el sol asomaba tras la Luna.
Esos fenómenos celestes ocurren una vez por década. El último fue en 2013, y el siguiente no ocurrirá hasta 2031. Se producen cuando la Tierra está en el punto exacto para que la Luna y el Sol se ven casi del mismo tamaño en el cielo, dijo el experto solar de la NASA Michael Kirk.
En algunos lugares, la Luna se ve un poco más cerca y bloquea el Sol en un eclipse. Pero cuando la Luna está un poco más lejos, deja asomar algo de la luz del sol en un eclipse anular.
“Es un fenómeno loco”, dijo Kirk. “En realidad se ve a la Luna hacerse más grande en el cielo".
Otros eclipses solares en el futuro serán más fáciles de ver. Un eclipse anular a mediados de octubre y un eclipse total el próximo abril serán visibles para millones de personas en el continente americano.
FR