El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, busca un nuevo periodo al frente de la Casa Blanca. Aunque en las encuestas va abajo de su rival demócrata, Joe Biden, existen probabilidades de que pueda ganar la elección, esto debido a que se vota por colegios electorales.
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Los casi cuatro años de gestión de Donald Trump han estado envueltos en polémica constante, desde la pandemia hasta la guerra comercial con China, pasando por la migración y su pocas acciones para combatir la crisis climática. ¿Qué pasará si Donald Trump es reelecto como presidente? Aquí te explicamos.
La pandemia del coronavirus se irá sola, según Trump
Trump insiste en que Estados Unidos pronto regresará a la normalidad con la llegada de una vacuna contra el coronavirus, pero la realidad es que muchos estados han sufrido un repunte de los casos, y él mismo ha desautorizado a los expertos de su propio gobierno que han pedido más medidas sanitarias para frenar el contagio.
Trump, quien estuvo hospitalizado con coronavirus, asegura que pronto vendrán tratamientos y vacunas. Los expertos advierten que podría tardar un tiempo más. Hace algunos días, su asesor Mark Meadows afirmó que en Estados Unidos ya no se puede controlar la propagación del covid-19.
Hasta el momento, Estados Unidos es el país más afectado por la pandemia en números totales, con más de 9 millones de contagios y más de 230 mil muertes, pero lejos de los primeros lugares por tasa, con 237 casos por cada 100 mil habitantes. Superaría las muertes superen pronosticadas en la Casa Blanca, que rondaba hasta con 240 mil muertes asociadas a la pandemia.
El actual mandatario espera mantener una línea poco rígida para contener la pandemia, donde priorizará la reapertura económica y de otras actividades en vez de ordenar un control más estricto para confinar a la población. Sin embargo, se desconoce el futuro del 'zar' de coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, ya que ha tenido constantes enfrentamientos por el manejo de la pandemia.
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Antes de la pandemia, el bajo desempleo y el pujante mercado bursátil ofrecían a Trump un escudo para sus ambiciones reeleccionistas. Sin embargo, ante el estallido del coronavirus, el desempleo se ha disparado y la bolsa, aunque se ha recuperado un poco, sigue mostrando tendencias erráticas.
Trump ha vaticinado que la economía “despegará como un cohete” a finales del 2020 y todo el 2021, y promete que pronto vendrá una vacuna antivirus que permitirá a todos regresar a la normalidad. Ha prometido una reducción de impuestos de nómina, idea que se vio frustrada por la oposición de ambos partidos este año pero que, en caso de una reelección, podría prosperar.
Un análisis del Comité de Responsabilidad Presupuestaria calcula que el plan de Trump incrementaría la deuda nacional en 5 billones de dólares en 10 años, y eso encima de los 13 billones en déficit que el país tendrá en ese lapso, esto conforme a los paquetes de rescate financiero que pueda aprobar en el Congreso de Estados Unidos, además de cómo influirán las finanzas tras la entrada en vigor del T-MEC. La deuda nacional actualmente asciende a más de 20 billones de dólares.
La migración seguirá igual, e incluso, sería más estricta
Trump ha dejado en claro, con sus acciones y su retórica, que desea limitar la migración a Estados Unidos, tanto legal como ilegal. Lo más probable es que eso siga en caso de una reelección. Es probable que busque por vías legales limitar aún más las solicitudes de asilo de los migrantes centroamericanos.
Pero también hay posibilidad es que use sus acuerdos con Guatemala, Honduras y El Salvador como modelo para otros países, para que acepten en territorios suyos las solicitudes de asilo de personas que desean entrar a Estados Unidos. En el caso de México, se podrían mantener las buenas relaciones que han mantenido tanto Trump como el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Otra política que seguramente continuará es la ofensiva contra las ciudades que se han autocalificadas de “santuarios” para migrantes, es decir, donde las fuerzas policiales locales no están obligadas a entregar a inmigrantes a las agencias federales. Así como continuar con las redadas masivas para personas que se encuentren en Estados Unidos de forma ilegal.
También, es muy probable que, de ser reelegido, Trump insista en su idea de construir un muro en la frontera con México. En este primer período Trump logró construir cerca de 650 kilómetros del muro, aunque en su mayoría eran reemplazos de partes que ya existían.
La política internacional, un verdadero misterio que sería predecible
Trump ha tenido varios desencuentros conforme a la política internacional de Estados Unidos, desde mantener conflictos con sus habituales aliados, como la OTAN, como tensar aún más las relaciones con China e Irán en actos como las visitas oficiales a Taiwán o el conflicto nuclear con Teherán.
Aunque con México se podrían mantener las buenas relaciones, se mantendrá a una línea más feroz con Cuba y Venezuela, donde gobierna el comunismo. En el caso de Brasil, dependerá principalmente de cómo avanzará la gestión de Jair Bolsonaro, su aliado ideológico, esto ante su posible campaña de reelección del ex militar en 2022.
En tanto, con la Unión Europea se mantendrá esta disputa por los prepuestos de la OTAN, principalmente contra Francia y Alemania. Sin embargo, ante la inminente retiro de Angela Merkel como canciller y el futuro incierto de Emmanuel Macron para una posible reelección, no se puede mantener un pronóstico con certeza.
El punto más incierto está en Asia. Trump ha reiterado que buscará responsabilizar a China por iniciar la pandemia de covid-19. Beijing ha manifestado plenamente que no desea la victoria del republicano, ya que supondría más tensión que podría escalar a conflictos bélicos en el peor de los casos. Una postura similar con Irán, que ya quedó mostrada a inicios del 2020 con la muerte del general Qasem Soleimani.
La ley y el orden antes que combatir el racismo endémico
En caso de que gane Donald Trump, se reforzaría aún más la política de "la ley y el orden" ante las protestas por el racismo policial que se presentaron a partir del homicidio de George Floyd en mayo pasado, donde condenará a los grupos de extrema izquierda como Antifa y desplegará la Guardia Nacional para controlar las manifestaciones.
Sin embargo, existe el temor de que aumenten los choques ideológicos. La extrema derecha e izquierda defenderán sus valores ante la amenaza del otro bando. Además, la polarización política en Washington se hará más evidente entre los demócratas y republicanos.
La crisis climática, pendiente de un hilo
Trump había acordado la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París en 2017, al asegurar que eso limitaría el crecimiento del país en combustibles fósiles y altamente contaminantes. en caso de permanecer Trump en la Casa Blanca, los científicos predicen que el cambio climático será completamente irreversible.
El mandatario ha sido ampliamente criticado tanto por activistas como científicos por sus nulas acciones climáticas, que ya se empezaron a mostrar durante los incendios forestales en California el pasado verano. Trump no ha mantenido un plan concreto para transitar a las energías renovables.
Eliminar el "Obamacare" y derechos progresistas a toda costa
Como candidato, Trump prometió reemplazar “inmediatamente” la reforma de salud propuesta bajo la presidencia anterior de Barack Obama. Hasta el día de hoy, y a pesar de la retórica del gobierno, Trump no ha divulgado cuál es la propuesta suya.
Es probable que lo logre de todas maneras ya que la Corte Suprema, que ahora tiene una sólida mayoría de conservadores de seis contra tres, escuchará pronto argumentos para decidir si la propuesta es legal.
Con la nueva jueza Amy Coney Barrett en el cargo, es posible que con el brazo conservador empiecen a limitar algunos derechos como el aborto, aprobado por el caso Roe vs. Wade de 1973, y de la comunidad LGBT en ciertos puestos como el ejército y la no discriminación.
Con información de AP y EFE
dmr