Las imágenes de fiestas callejeras sin mascarillas ni distancia tras el fin del estado de alarma causaron estupefacción en España, donde el gobierno lanzó este lunes un llamado a la "responsabilidad". Y es que en las últimas horas, los médicos han atendido a personas intoxicadas por el alcohol y otras sustancias, esto pese a que la pandemia por covid-19 aún no acaba.
"El fin del derecho de excepción no significa el fin de las restricciones", advirtió el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, en un artículo en el diario El País.
"Las autoridades debemos seguir actuando y la ciudadanía comportándose con responsabilidad", agregó Campo.
Tras medio año de toque de queda y de prohibición de la movilidad entre regiones amparados por el estado de alarma decretado a finales de octubre, los españoles recuperaron algunas libertades el domingo, cuando concluyó este régimen de excepción.
Portada de numerosos diarios españoles, las imágenes de ciudadanos festejando y bebiendo en las calles de Madrid o Barcelona, en muchos casos sin mascarilla ni distancias de seguridad, impactaron en España.
"La libertad no consiste en hacer botellones (reuniones de jóvenes para beber alcohol al aire libre)", advirtió el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, del Partido Popular (PP, derecha).
Al respecto, Robert Güerri, jefe de servicio de enfermedades infecciosas en el Hospital del Mar de Barcelona, reveló para La Vanguardia que en el centro recibieron diez veces más personas intoxicaciones ante este consumo de alcohol y otras sustancias. En los hospitales aumentó la hospitalización por intoxicaciones etílicas y por consumo de drogas.
“Han sido unas noches muy activas. Solo en el Hospital del Mar atendimos entre 15 y 20 personas por intoxicaciones graves en 24 horas”. En este sentido, reconoce temer que se haya precipitado el fin del estado de alarma ya que “se ha pasado de 0 a 100 de una forma muy brusca”, reveló Robert Güerri.
Por ello, lamentó que las administraciones no hayan impulsado medidas legales para evitar este tipo de actitudes de los habitantes:
“Si a raíz de estas conductas en diez o quince días volvemos a situaciones complejas lo lamentaremos y acabaremos actuando tarde y mal”, agregó Robert Güerri.
El gobierno y las medidas contra covid-19
Justificando su actuación, el gobierno aseguró, en voz de su ministro de Justicia, que la legislación ofrece mecanismos "adecuados a la fase de la pandemia en la que nos encontramos", subrayando que "el 28% de la población (cuenta) con al menos una dosis de la vacuna".
Las regiones pueden limitar horarios o aforos de bares, restaurantes y comercios, pero para aplicar medidas que afectan derechos fundamentales como el toque de queda o cierres perimetrales deben solicitar una autorización judicial.
El turístico archipiélago de Baleares y la región de Valencia, en el este del país, por ejemplo, obtuvieron luz verde de los tribunales para mantener el toque de queda.
"Orgullo porque en la Comunidad Valenciana nadie ha discutido nunca que vale más: una cerveza o una vida", tuiteó el presidente socialista de la región, Ximo Puig.
Por el contrario, en el archipiélago atlántico de Canarias o en el País Vasco (norte), los tribunales rechazaron las solicitudes para mantener el toque de queda.
Canarias anunció que impondrá un recurso ante el Tribunal Supremo, una posibilidad abierta por el gobierno que estableció un mecanismo especial para que las regiones puedan acudir a la más alta jurisdicción española, para que esta siente jurisprudencia y unifique criterios.
El Supremo fijará "la pauta común para todo el país", indicó el ministro de Justicia, añadiendo que el gobierno está dispuesto a estudiar "cambios legales adicionales" si así lo recomienda este tribunal.
grb