El presidente de España, Pedro Sánchez, presentó hoy en el Congreso su plan de regeneración democrática que, entre otras medidas, pretende ayudar a acabar con las fake news, garantizar la transparencia, la independencia y el pluralismo de los medios de comunicación, a los que el gobierno ayudará con una partida de 100 millones de euros provenientes de fondos europeos para apoyar a su digitalización.
El líder socialista explicó que en las próximas semanas propondrá a los partidos que se obligue por ley a que los medios concreten quiénes son sus accionistas y qué entidades o personas los financian. También impulsará una normativa para limitar la publicidad institucional.
Sánchez ya había adelantado parte de su plan luego de que su esposa, Begoña Gómez, fuera denunciada ante un juez por el pseudosindicato de ultraderecha Manos Limpias por un presunto delito de tráfico de influencias y de corrupción en los negocios, que basó sus informaciones en recortes de periódicos digitales, uno de ellos falso.
El presidente confirmó también que presentará una modificación de los derechos al honor y la rectificación. Todo esto forma parte del debate que quiere plantear sobre el papel de algunos pseudomedios y la difusión de bulos o fake news y que a partidos como el ultraderechista Vox e incluso el conservador Partido Popular (PP) sirven para alimentar sus campañas contra el Ejecutivo.
De esta manera, el gobierno en su plan pondrá un tope a la financiación con fondos públicos de los medios de comunicación digitales que a su juicio “no tienen lectores”, y a los que el presidente llama “pseudomedios”.
Así lo dijo:
Ante el Pleno del Congreso de los Diputados, Sánchez expresó que lo que hay que hacer es trasponer a la legislación española lo que exige el reglamento de la Unión Europea de medios de comunicación aprobado hace unos meses, con el respaldo de todos los grupos parlamentarios, también el PP, y con la excepción de la ultraderecha, en la Eurocámara.
Por ello, detalló que en que dicho reglamento se plantea que “los ciudadanos deben conocer las fuentes de financiación de los medios de comunicación, el nombre de sus accionistas y las cifras de audiencia de forma honesta, para evitar fraudes en la inversión publicitaria por parte de gobiernos de nuestra democracia, mediante el uso, por ejemplo, de bots o de clickbaits y también la injerencia de actores extranjeros”.
Además, defendió la necesidad de “limitar la financiación de las administraciones públicas para que no haya medios de comunicación que tengan más financiadores públicos que electores y asegurar que no haya partidos políticos que compren líneas editoriales con el dinero de todos los contribuyentes”.
Sánchez se burla de la oposición:
También ha adelantado que el gobierno quiere “reforzar los derechos al honor y a la rectificación de la ciudadanía". “Los medios tienen que ser libres, poder desarrollar su propia línea editorial y, a su vez, los ciudadanos tienen que poder defenderse si se vierten sobre ellos calumnias o acusaciones infundadas” para lo cual se propondrá “una nueva reforma de la Ley Mordaza”.
El presidente español aclaró que “evidentemente no es la misión ni la intención del Gobierno repartir carnés de fiabilidad entre los medios de comunicación”, pero “sí es obligación de los poderes públicos desarrollar lo acordado en Europa”.
SNGZ