California se convirtió el miércoles en el primer estado en prohibir a los grandes minoristas despedir a los trabajadores de almacén por cuotas faltantes que interfieren con el uso de baño y los descansos bajo una nueva ley firmada por el gobernador Gavin Newsom que surgió del impulso de Amazon para acelerar los productos a los consumidores más rápidamente.
La medida también prohíbe a Amazon, el gigante minorista en línea y empresas similares, castigar a los trabajadores por seguir las leyes de salud y seguridad y permite a los empleados demandar para suspender cuotas inseguras o revertir represalias.
El proyecto de ley se aplica a todos los centros de distribución de almacenes, aunque los proponentes fueron impulsados por el dominio de Amazon.
“No podemos permitir que las corporaciones antepongan las ganancias a las personas”, dijo Newsom en un comunicado de prensa en el que anunció que había firmado la ley.
La ley, AB 701, fue redactada por la asambleísta demócrata Lorena González, abogada y exlíder sindical. Acusó a Amazon de disciplinar a los trabajadores del almacén bajo la dirección de "un algoritmo" que rastrea las actividades de los empleados y puede determinar que cualquier cosa que no esté directamente relacionada con el movimiento de paquetes está "fuera de la tarea".
"Amazon está presionando a los trabajadores para que arriesguen sus cuerpos para la entrega al día siguiente, mientras que ni siquiera pueden usar el baño sin temer represalias", dijo González cuando la Legislatura aprobó su proyecto de ley.
Los trabajadores de los almacenes en California son 54% latinos y 9.5% afroamericanos, según la Federación Laboral del Condado de Los Ángeles, que copatrocinó el proyecto de ley.