Dos oficiales de policía del centro de California son acusados formalmente por un jurado de agresión y otros delitos graves, por consecuencia de la supuesta golpiza que hicieron a un adolescente afroamericano, provocando grandes hematomas en su cara.
El día viernes, la fiscal de distrito del condado de San Joaquín, Tori Verber Salazar, anunció que los ex oficiales Michael Stiles y Omar Villapudua fueron acusados de delitos por agresión con fuerza hacia Devin Carter, un joven de 17 años a quien le provocaron grandes lesiones corporales.
Devin Carter conducía hacia la casa de su padre cuando la policía de Stockton lo detuvo la noche del 30 de diciembre. La policía dice que iba a más de 160 km por hora y los condujo en una persecución de 3 minutos antes de que lo obligaron a detenerse.
John Burri, el abogado de Devin Carter, reveló por medio de fotos que Devin Carter tenía moretones de color morado alrededor de los ojos y lo que parece ser la huella de un zapato o bota en el lado izquierdo de la cara.
Las imágenes de la cámara corporal muestran a los oficiales sacando a Carter del automóvil. Se les puede escuchar gritar improperios al adolescente y decirle que deje de resistirse. Se escucha a Carter gritar de dolor y miedo, y decirle a los oficiales que no se está resistiendo.
Burris dijo que los agentes golpearon, arrodillaron y patearon a Carter en la cara, el cuello y la espalda mientras yacía en posición fetal. El departamento advierte a los oficiales "que eviten golpear a un arrestado alrededor del área de la cabeza y el cuello cuando sea posible".
“Todo el tiempo está llorando. Es bastante horrible lo que le hicieron, y fue una gran paliza que hicieron los policías ”, dijo Burris, quien ganó una sentencia de $3.8 millones contra el departamento de policía de Los Ángeles luego de que oficiales golpearon al automovilista Rodney King en 1991.
“Estamos encantados de que se esté procesando y esperamos que envíe un mensaje claro a otros en este departamento de que hay consecuencias”, dijo el abogado de Carter.
Carter estaba acelerando en parte porque no quería detenerse en la oscuridad, dijo Burris. El adolescente estaba aterrorizado de que pudiera morir, como Floyd, dijo Burris. El adolescente fue llevado a un hospital para ser evaluado antes de ser ingresado en el centro de menores por evadir y resistirse al arresto.
“Ninguna madre debería ver u oír a su hijo golpeado por la policía y llorar impotente por el dolor”, dijo la madre del adolescente, Jessica Carter.
Hasta el momento, las acusaciones contra los dos ex oficiales Michael Stiles y Omar Villapudua permanecerán selladas y los acusados deben comparecer ante el tribunal el 5 de noviembre.
“Esta acusación del gran jurado nos recuerda a todos que cuando la policía usa fuerza ilegal, socava la confianza de la comunidad. Como hija de un oficial de policía, sé lo importante que es esa responsabilidad para restaurar la confianza, la seguridad y el honor de la comunidad en la profesión”. Dijo Tori Verber.
Los ex oficiales actuaron fuera de su entrenamiento y de la política del departamento. Sin embargo, el caso ya ha causado indignación en California, debido a que se ha presentado una creciente indignación en Estados Unidos por el uso excesivo de la fuerza policial, especialmente en contra de los afroamericanos.
Recordando el caso que provocó las manifestaciones de BLM cuando el ex oficial de policía de Minneapolis Derek Chauvin fue declarado culpable de homicidio y sentenciado a 22 años y medio, al quitarle la vida a George Floyd, un hombre afroamericano.
wgp