El Senado del estado de Florida, Estados Unidos, aprobó ayer una polémica ley que obliga a las menores a tener el consentimiento de los padres para abortar, que se prevé será conciliada con otra iniciativa similar en la Cámara baja y firmada por el gobernador Ron DeSantis.
Después de un largo y polémico procedimiento en la Cámara alta, la medida fue aprobada con 23 votos a favor y 17 en contra, pese a la oposición de los demócratas que la consideran inconstitucional y una violación a la ley de privacidad.
Se prevé que la medida, junto con otra similar que sigue su curso en la Cámara baja, serán firmadas por el republicano DeSantis, que ya anticipó el mes pasado que lo haría en su discurso anual ante el Congreso estatal.
En caso de aprobarse definitivamente, Florida sería un estado más de los 26 que actualmente solicitan que al menos uno de los padres o tutor legal otorgue permiso para abortar mediante una autorización por escrito.
Actualmente, la legislación establece que los tutores legales solo sean notificados en caso de que el menor solicite un aborto, pero ahora serán éstos los que tendrán que aprobar el procedimiento salvo en caso de emergencia médica.
La nueva ley, que encontró la oposición demócrata, fue aprobada gracias a la mayoría republicana del Senado argumentando que los padres deben estar involucrados en decisiones de importancia vital como son los abortos.
Sin embargo, para aquellos que están en situaciones de abuso o cuando el consentimiento paterno no tiene en cuenta el beneficio del menor, la ley proporciona un proceso judicial que también implica la intervención de un adulto.
Terrie Rizzo, presidenta del Partido Demócrata de Florida, criticó al gobernador DeSantis y los legisladores republicanos por “desmantelar los derechos al aborto en Florida”.
CLAVES
SE SUMA
Con esta normativa, Florida se sumaría a los 26 estados de EU que ya solicitan que al menos uno de los padres otorgue permiso al menor.
VOTO REPUBLICANO
La ley fue aprobada gracias a la mayoría republicana del Senado, argumentando que los padres deben estar involucrados en decisiones de importancia vital.