El presidente de Estados Unidos, Joe Biden revocará hoy la regla que prohíbe que el país financie a las organizaciones no gubernamentales (ONG) extranjeras que ofrezcan servicios para abortar en esa nación, según informó la Casa Blanca, una medida que es conocida como "la política de Ciudad de México".
La norma apareció cuando el republicano Ronald Reagan era presidente, de ahí ha surgido un estira y afloja debido a que las administraciones demócratas la han revocado, mientras que su contraparte la ha vuelto a imponer. Hoy Joe Biden la rechaza, cumpliendo así con una especie de tradición política.
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En sí, la medida prohíbe a Estados Unidos financiar cualquier ONG que ofrezca incluso consejos sobre el aborto, aunque financie esa parte de sus actividades con otros fondos.
De todos modos, ahora la administración de Joe Biden ordenará igualmente al Departamento de Salud "tomar acciones inmediatas para considerar si debe revertir las regulaciones" que tratan sobre los centros de planificación familiar en Estados Unidos.
El gobierno de Donald Trump prohibió a las organizaciones que ofrecían servicios ginecológicos que propusieran abortos a sus pacientes, con el riesgo de perder sus subvenciones.
La poderosa organización Planned Parenthood, que gestiona numerosas clínicas que practican interrupciones voluntarias del embarazo (IVG), pero también la detección del cáncer de mama, por ejemplo, tuvo que renunciar desde entonces a los fondos federales.
¿Cómo surgió el aborto legal en EU?
El aborto es legal en Estados Unidos desde una decisión histórica de la Corte Suprema en 1973, pero todavía divide mucho a la población de ese país, enfrentando una oposición aún muy viva, especialmente entre los sectores religiosos.
Como cada año, cuando se acerca la fecha del aniversario del caso Roe contra Wade, el fallo de la Suprema Corte en 1973 que aseguró a las mujeres el derecho al aborto, los opositores a la interrupción del embarazo previeron hacerse escuchar el viernes.
Pero, obligados por la pandemia del coronavirus, su "marcha" será virtual, contrariamente a la del año pasado, en la que participó Donald Trump.
Su sucesor, Joe Biden, es un ferviente católico, pero apoya el derecho de las mujeres a elegir si quieren continuar con su embarazo.
Sus anuncios son "unos primeros pasos extremadamente importantes en la buena dirección, pero la administración debe ir más lejos", valoró Herminia Palacio, presidenta del Instituto Guttmacher, que defiende este derecho.
También en el campo de la salud, Biden debe firmar igualmente esta jornada un decreto que facilitará el acceso de los estadunidense que no tengan cobertura médica ofrecida por su empleador al seguro federal creado por Barack Obama.
OMZI