Un gran jurado federal en Seattle, Estados Unidos, resolvió durante esta jornada acusar a un joven de 21 años por golpear dos veces en la cara a una tripulante e intentar abrir la puerta de la cabina de un avión mientras se realizaba un vuelo de la empresa Delta Air Lines de Hawái a Washington a fines del año pasado.
Ryan Cajimat fue acusado por interferencia con los tripulantes y pasajeros del vuelo, así como por el asalto en la zona de jurisdicción del área especial de Estados Unidos, según lo notificado por el Departamento de Justicia de ese país.
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Según revela CBS News, fue en un vuelo de Honolulu a Seattle, previo a Navidad, que el sujeto comenzó con una conducta perturbadora, teniendo problemas con los integrantes de la tripulación, quienes lo tuvieron que amarrar al asiento durante todo el vuelo hasta que la aeronave aterrizó en el aeropuerto.
Las primeras medidas fueron la multa de 52 mil dólares (sobre el millón 80 mil pesos) impuesta por la Administración Federal de Aviación y la prohibición, por parte de la empresa, a adquirir un vuelo de la firma.
El medio estadunidense, citando a los fiscales federales, revela que la interferencia se puede llegar a castigar con hasta 20 años de cárcel y una multa que puede llegar a los 250 mil dólares (pasando los 5 millones 200 mil pesos), mientras que el asalto a un avión tiene una pena que puede llegar a un año de prisión y una sanción económica de 100 mil dólares (alrededor de 2 millones 80 mil pesos).
No es la primera situación compleja por la que han pasado los tripulantes y pasajeros de vuelos en Estados Unidos frente a acciones violentas de algunos usuarios. En el último tiempo, tras la reapertura de vuelos por la pandemia del covid-19, son varios incidentes que se han podido captar que han llevado incluso a que se les inmovilice con cinta adhesiva a quienes toman alguna actitud violenta.