La estrategia del Partido Demócrata cambió en cuestión de meses. Ahora será Kamala Harris la que subirá al atril del que será su primer debate presidencial contra Donald Trump para reivindicar lo retrocedido tras la desafortunada participación de Joe Biden en la primera edición.
“Me enfrenté a perpetradores de todo tipo (...) así que escuchen cuando les digo que conozco a los tipos como Donald Trump”, exclamó la vicepresidenta, cuya popularidad le ha servido para ‘pisar los talones’ a su adversario en estados que podrían definir a la o el siguiente Presidente de Estados Unidos.
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Los “estados bisagra” (swing states por su traducción al inglés) son aquellos en donde ningún partido tiene clara ventaja u ostenta de una tradición de apoyo y, por ende, suelen ser determinantes en los resultados finales.
Para las elecciones del 5 de noviembre del 2024 serán Michigan, Arizona, Wisconsin, Nevada, Georgia y Pensilvania los que jueguen dicho rol; más aún cuando el margen entre candidaturas es mínimo, como lo observado con Kamala Harris y Donald Trump.
Un promedio obtenido entre cuatro encuestas (New York Times/ Colegio de Siena, Universidad de Quinnipiac, Ipsos/ABC News y Fabrizio/Lee & Associates/GBAO/Wall Street Journal) arroja que la demócrata superaría al candidato del Partido Republicano por dos puntos, al ostentar 49% de la preferencia electoral. Cabe señalar que sólo el estudio de NYT/Colegio de Siena da ventaja al empresario con 48% frente a 47% de Harris.
Esa mínima diferencia también se observa en las encuestas de los estados bisagras, de los cuales, según New York Times, tres reportan empate con el 48% de la preferencia electoral: Nevada, Georgia y Arizona. En tanto, la encuesta del medio CNN sólo arrojó empate en Pensilvania, donde Kamala Harris y Donald Trump (quien sufrió un atentado durante un mitin en ese estado) se emparejaron con 47%.
Sin embargo, el resultado de ambos sondeos coincidieron en que la vicepresidenta estaría gozando del 50% en el estado de Wisconsin, frente al empresario quien tendría 47% para NYT y 44% en CNN.
Los retos de Kamala, 'talón de Aquiles’ del Demócrata
Quedarse con la candidatura del partido del asno no iba a ser tarea fácil. Si bien analistas reconocen un alza de la popularidad de Kamala Harris tras la renuncia de Biden, el sondeo del New York Times/ Colegio de Siena dibuja un escenario aún más escabroso de lo esperado.
Según el estudio, la ex fiscal debe convencer a una cantidad considerable de personas que dijeron requerir más tiempo para conocerla mejor. En específico el 28% de posibles votantes estuvieron de acuerdo con la afirmación “Siento que necesito aprender más de Kamala Harris”, mientras sólo 9% convinieron en la misma pregunta respecto a Donald Trump.
“Estos votantes (...) pintan un retrato de un electorado que podría ser más fluido de lo que parece”, destaca la encuesta.
Otra alerta para el partido azul— además de que el 47% de votantes percibe a la vicepresidenta “muy liberal”, frente al 32% que señala a Trump de “muy conservador”—, es que Kamala Harris no representa el cambio que busca la ciudadanía de las barras y las estrellas.
Y es que el 63% de las personas encuestadas seleccionaron la opción “Un cambio mayor” ante la pregunta “¿Crees que el siguiente presidente debería representar un cambio importante, cambio menor o ningún cambio respecto a Joe Biden?”. Pero sólo el 25% de dicho espectro opinó que la demócrata representa ese cambio y el 56% la señaló como “lo mismo de siempre"; contrario con Donald Trump a quien el 51% sí lo considera como un cambio importante.
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En ese sentido, el sondeo destacó otro reto para la demócrata al recordar que ha sido responsabilizada por el manejo de ciertos asuntos en la administración de Joe Biden: “Aproximadamente la mitad de los votantes, en su mayoría republicanos, dijeron que Harris tenía al menos algo de culpa por el aumento de los precios y en la retirada de Afganistán”.
Por su parte, aunó el documento, dos tercios de todo el espectro político encuestado le adjudicaron fallas relativas al manejo de la frontera del suroeste.
Las reglas del debate entre Kamala y Trump
El azar— a través de una tómbola— decidió que el candidato republicano será el encargado de cerrar el segundo encuentro presidencial; mientras la vicepresidenta escogió discutir desde el atril derecho, desde la vista de la audiencia.
Ambas son características que se observaron en el primer debate por la Presidencia de Estados Unidos. Sin embargo, para esta ocasión votantes de tres estados bisagra conceden una ventaja a Harris sobre Trump al señalarla con la mejor salud para ejercer como presidenta; cualidad que con Biden era cuestionada.
Según la encuesta de CBS News, 64% de electores en Michigan escogieron a la vicepresidenta ante la pregunta ¿Cuál de los dos candidatos tienen salud mental y cognitiva para ser presidente? y a Trump lo escogió el 47%. En tanto en Pensilvania Harris tuvo 64% y el empresario 49%, y Wisconsin registró 68% y 48% respectivamente.
¿Joe Biden está enfermo?
Así, ambos aspirantes a la Oficina Oval se enfrentarán el 10 de septiembre en el Centro Constitucional Nacional de Filadelfia en un encuentro con reglas similares a las que rigieron a la primera edición de la carrera 2024:
- Una duración de 90 minutos.
- No podrán llegar con notas pre-escritas ni utilizarán props más que una hoja y una pluma que se les ofrecerá en el lugar.
- Los micrófonos estarán silenciados.
- No habrá audiencia.
- Estará prohibido que la y el candidato conversen con su equipo durante el debate.
- Contarán con dos minutos para responder cada pregunta, otros dos para refutar y uno más para agregar comentarios o clarificar.
ASG