Después de urgir a abandonar el país y ordenar la salida de la mayoría del personal diplomático, Estados Unidos dijo a sus ciudadanos que se encuentran en Ucrania que no podrá ayudarles en una "zona de guerra" si Rusia invade el país.
"Las zonas de guerra son inherentemente volátiles, impredecibles y extremadamente peligrosas por definición. Tendremos muy poca capacidad para ayudar a nuestros ciudadanos cuando eso ocurra", explicó hoy en una llamada con periodistas un alto funcionario del Departamento de Estado.
El funcionario pidió a los estadunidenses que se encuentren todavía en Ucrania tener expectativas "realistas" sobre lo que el gobierno de su país podrá y no podrá hacer en una situación de conflicto armado, y les recordó que las Fuerzas Armadas no irán a rescatarles en el último minuto.
Sobre la retirada del personal de la embajada en Kiev, el alto funcionario explicó que se quedarán únicamente aquellos diplomáticos cuyo trabajo resulte esencial para mantener las funciones "principales" de la misión, fundamentalmente, permanecer en contacto directo con el gobierno de Ucrania.
La embajada dejará de ofrecer servicios consulares a partir del domingo y tan sólo los ofrecerá desde una pequeña presencia consular en Lviv (en el oeste del país) para manejar emergencias, pero que no podrá proporcionar pasaportes, visas o servicios consulares habituales.
El Reino Unido, Noruega y Dinamarca también pidieron el viernes a sus ciudadanos abandonar Ucrania mientras todavía haya medios comerciales disponibles para hacerlo, mientras que España aseguró que tiene preparado el dispositivo de evacuación de españoles por si hubiera que activarlo.
La Unión Europea (UE) a su vez ha decidido permitir al personal "no esencial" de su representación diplomática en Kiev salir de Ucrania.
LG