El proceso electoral en los Estados Unidos, que hoy llega a su clímax con la jornada de votaciones, enfrenta no sólo el reto de una elección virtualmente empatada en las encuestas y la sombra de un conflicto postelectoral, sino además la posibilidad de atentados contra los candidatos o la población en general.
El fallido intento de asesinato en contra de Trump en un mitin en Pensilvania, el 13 de julio, que dejó a dos personas muertas, en la cual identificaron un potencial tirador en las inmediaciones de su club de golf en Palm Beach, Florida.
En este contexto, incrementaron los niveles de alerta de todas las agencias federales y locales implicadas en la protección de candidatos y de los comicios.
Asimismo, a ellos se suma una advertencia emitida por el FBI y la comunidad de inteligencia de posibles incitaciones a la violencia contra funcionarios electorales a través de videos y noticias falsas sobre supuestos fraudes impulsadas en internet por actores extranjeros como Rusia e Irán.
Los detalles de los operativos de seguridad en torno a los candidatos presidenciales se mantienen bajo confidencialidad pero MILENIO pudo documentar ayer el reforzamiento de la vigilancia en la residencia de Donald Trump en Mar-A.Alago en Palm Beach, Florida, así como en el centro de convenciones de esta ciudad donde la campaña de Trump ha convocado a una “noche de fiesta de la elección” a la que se espera que asistan cerca de diez mil personas, entre ellas el propio candidato.
¿Cuál es el equipo de seguridad para Trump?
Además, agentes de la Policía del condado de Palm Beach ubicados a las afueras de la residencia de Trump comentaron que el Servicio Secreto amplió el cinturón de seguridad en el perímetro del club en el que se encuentra la residencia, y se ha prohibido expresamente estacionarse o realizar cualquier tipo de grabación.
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A la distancia se pudo observar a los agentes haciendo recorridos con los llamados Dispositivos Automatizados de Vigilancia en el Terreno (AGSV por sus siglas en inglés) similares a un perro robot, que entre otras cosas están equipados con cámaras y escáneres para identificar tanto explosivos como cualquier amenaza electrónica como, por ejemplo, otros drones terrestres o aéreos.
El servicio secreto también desplegó sobre la avenida SouthernBlv, que conecta a la ciudad con la península done se ubica la residencia del expresidente, dos torres de seguridad equipadas con cámaras infrarrojas similares a las que se usan en las manifestaciones para monitorear el tránsito de vehículos y movimientos de personas en el perímetro exterior de la residencia.
En el Centro de Convenciones de la Ciudad de Palm Beach donde la campaña de Trump ha organizado lo que llaman la “fiesta de la noche de la elección”una cuadrilla de contratistas privados comenzó a instalar desde anoche un cinturón completo de vallas metálicas de dos metros de altura, acompañado de barreras de concreto antichoque pensadas incluso para contener un ataque con vehículos.
Además de la vigilancia que dará el servicio secreto y la policía, los organizadores del evento también han contratado un equipo de seguridad privada proveniente de Carolina del Norte que llegó el fin de semana con al menos seis perros (estos si de carne y hueso) entrenados para la localización de explosivos.
Uno de sus integrantes comentó a MILENIO que esperan una afluencia de más de 7 mil personas tan sólo al interior del centro previamente acreditadas, asimismo, no se permitirá el acceso a nadie que no esté previamente acreditado.
El Departamento de Policía del Condado de Palm Beach también anunció que se han cancelado los descansos de todos sus agentes pues hay anuncios de posibles manifestaciones de simpatizantes del partido demócrata en la ciudad, por lo que hay instrucciones de contener en lo posible encuentros con simpatizantes de Trump.
Estado de alerta en New York y Washington
Desde hace semanas todas las agencias de seguridad del país se encuentran en “estado de alerta”, con periodos de vacaciones suspendidos y los mayores despliegues de fuerza ante la posibilidad incluso de algún tipo de atentado terrorista a propósito de la parte final del proceso electoral.
Un reporte de posibles amenazas y escenarios de riesgo elaborado por el Buróde Inteligencia del Departamento de policía de Nueva York y citado por la cadena ABC News advierte que no sólo los candidatos sino el personal que trabaja en los comicios y los votantes podrían estar en una situación de riego.
De acuerdo con un reportaje, el FBI ha recibido más de dos mil notificaciones de trabajadores electorales por potenciales amenazas lo que ha dado pie a la apertura de un centenar de investigaciones.
En Washington D.C. también se declaró desde la semana pasada un estado de alerta generalizado y se ha reforzado el cinturón de vallas metálicas alrededor de la Casa Blanca.
En el parque central de la capital estadounidense, conocido como National Mall y que entre otros alberga el icónico monumento a Washington y el memorial de Abraham Lincoln, se pudo observar a cuadrillas de agentes de seguridad con perros entrenados inspeccionando todos los vehículos estacionados alrededor.
Kamala Harris, la candidata del partido demócrata, ha anunciado que celebrará su fiesta de la noche de la elección en el campus de su alma mater, la Universidad de Howard, ubicada en la capital. Por ese motivo el campus fue cerrado para las clases presenciales desde finales de la semana pasada y se ha instalado un dispositivo de seguridad en la zona, que también incluye el cierre de vialidades.
Los medios locales en Washington reportaron que la circulación vehicular en todas las calles que rodean al campus fue restringida desde el lunes y sólo se permitiría el paso a personal autorizado y trabajadores esenciales de la propia Universidad.
La amenaza cibernética
Por los riesgos de posibles atentados físicos, se suman las advertencias de potenciales amenazas o ciberataques provenientes del exterior de los Estados Unidos con la finalidad de alterar los sistemas de votaciones o incluso crear falsos escenarios de un fraude electoral.
Asimismo, se señaló que el FBI junto con la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (ODNI), y la Agencia de Seguridad Cibernética y de Infraestructura (CISA) publicaron una declaración conjunta en la alertan que material fabricado y proveniente sobre todo de Rusia estaría circulando en la red para desestabilizar el proceso.
“La Comunidad de Inteligencia ha estado observando a adversarios extranjeros, en particular Rusia, llevando a cabo operaciones de influencia adicionales destinadas a socavar la confianza pública en la integridad de las elecciones estadounidenses y avivar las divisiones entre los estadounidenses", señalaron.
"Se espera que estas actividades se intensifiquen durante el día de las elecciones y en las próximas semanas, y que los relatos de influencia", indicaron
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KL