En las protestas de los últimos días en Barcelona, 288 policías han sido lesionados, en tanto que 194 personas fueron detenidas y de ellas 70 están a disposición judicial y 18 en prisión, según cifras del ministro del Interior del gobierno en funciones, Fernando Grande-Marlaska.
La tarde de este domingo, día siete desde que comenzaron las movilizaciones contra la sentencia del Tribunal Superior contra líderes independentistas, simpatizantes del movimiento “picnic per la república” lanzaron bolsas de basura en el cruce de calles Mallorca y Roger de Llúria, cerca de la sede del gobierno.
En la zona se colocaron vallas para impedir el acceso de los manifestantes, en tanto que un nutrido grupo de elementos policiales resguardan el lugar, de acuerdo a información de La Vanguardia.
En este contexto, los Comités de Defensa de la República (CDR) lanzaron un llamado para mantener las manifestaciones, con el objetivo de reprobar la condena judicial contra los líderes independentistas, así como las detenciones y los encarcelados que participaron en las movilizaciones.
Por el contrario, cientos de manifestantes con banderas españolas se reunieron en la Plaza Nueva Sevilla, frente al ayuntamiento local, para mostrar su apoyo a la unidad de España, gritando consignas como “¡Viva España!” y manifestando su rechazo a la violencia registrada en Cataluña.
A su vez, en su cuenta de la red social Twitter, el grupo denominado “Jóvenes en Defensa de España” canceló una manifestación contemplada para este domingo, ante “los continuos malentendidos”, dado que la ruta que pretendían seguir será similar a otra movilización contra la sentencia del “Procés”, convocada por el colectivo Obra Cultural Balear.
El primer grupo no contaba con el permiso oficial para manifestarse, en tanto que el segundo colectivo si, toda vez que lo gestionó con más anticipación. Ante ello, Jóvenes en Defensa de España anunciaron que lanzarán una convocatoria para una marcha “pacífica” por la unidad de España.
A su vez, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, adelantó que gestionará una reunión “urgente” a la delegación del gobierno en la región para solicitarle que no de permisos para nuevas movilizaciones proindependencia “hasta que no cese definitivamente la violencia en las calles de Cataluña”.
En el marco de una visita a Sotillo de la Adrada, Díaz Ayuso sostuvo que de ninguna manera se puede “permitir ni tolerar disturbios violentos” como los reportados el sábado en la plaza de Callao, toda vez que “perjudican gravemente la imagen de la Comunidad de Madrid y de España”.
La víspera, Madrid fue el centro de una manifestación con unos cuatro mil participantes, quienes demandaban la amnistía de los “presos políticos” de España y terminó en enfrentamiento con elementos de la Policía Nacional.
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