La Convención Ciudadana por el Clima, conformado por 150 ciudadanos franceses encargados de hacer propuestas en favor del clima, votaron este domingo a favor de la organización de un referéndum para introducir la lucha contra el cambio climático en la Constitución francesa y crear el delito de ecocidio.
El organismo, encargado de proponer medidas destinadas a reducir en un 40 por ciento las emisiones de gas de efecto invernadero, adoptó por amplia mayoría el principio de pedir en referéndum la introducción en el preámbulo y el artículo 1° de la Constitución las nociones de protección del medio ambiente, la biodiversidad y la "lucha contra el desarreglo climático".
Los participantes, elegidos por sorteo, rechazaron en cambio la idea de utilizar el referéndum para interrogar a los franceses sobre otras medidas específicas, lo que parece contrariar al presidente Emmanuel Macron, quien indicó esta semana que desea organizar en la medida de lo posible una consulta sobre diferentes asuntos.
La CCC ha rechazado así la idea de someter a referéndum 10 series de medidas sobre asuntos que van desde la renovación térmica obligatoria de los edificios a la limitación de la publicidad o medidas para reducir el espacio de los vehículos individuales.
"Constitución, ecocidio, está bien para un referéndum. Para el resto, que el poder asuma sus responsabilidades", dijo uno de los participantes, resumiendo los argumentos adelantados por la mayoría de los participantes.
Macron había decidido organizar este ejercicio de democracia participativa inédito en Francia a raíz de la crisis de los 'chalecos amarillos', activada precisamente por la introducción de una tasa carbono a los carburantes. El 29 de junio tiene previsto recibir a los participantes para darles las "primeras respuestas".
La CCC no ha vuelto introducir el impuesto a los carburantes pero ha propuesto otras 150 medidas. Una de las más polémicas es la reducción del tiempo de trabajo a 28 horas por semana, que fue descartada el sábado con el 65 por ciento de los votos.
Una medida que sin duda dividirá a la opinión pública es la reducción de la velocidad en las autopistas de 130 a 110 kilómetros por hora, que recibió el 60 por ciento de los votos. La propuesta ha enfurecido a las asociaciones de automovilistas, que todavía no se habían repuesto de la reducción de 90 a 80 kilómetros en las carreteras nacionales.
dmr