‘Manual de resistencia’, el lado más desconocido del presidente de España

La Aldea

Se trata de un libro en el que el presidente de gobierno cuenta desde cómo se cocinó la moción de censura, cuál era su relación con Rajoy y en el que habla también de su propio partido: el Partido socialista Obrero Español (PSOE).

El libro detalla la relación de Sánchez con Mariano Rajoy. (Especial)
José Antonio López
Madrid /

Ni siquiera sus detractores niegan que Pedro Sánchez (Madrid, 1972) es un superviviente en el pantanoso mundo de la política española. Un hombre que irrumpió en las filas socialistas desde abajo, que desafió y venció al aparato de su partido, que antes le humilló públicamente y le echó, pero volvió para convertirse en presidente de España tras aprobarse la moción de censura contra el conservador Mariano Rajoy.

Por primera vez en la historia de la democracia española, un presidente publica un libro durante su mandato. Manual de resistencia (Editorial Península, 2019) ya se puede adquirir en las librerías. Se trata de un libro en el que el presidente de gobierno cuenta desde cómo se cocinó la moción de censura, cuál era su relación con Rajoy y en el que habla también de su propio partido: el Partido socialista Obrero Español (PSOE).

“Nunca una moción de censura había triunfado en España”; “es imposible ganarle unas primarias al aparato de un partido (PSOE)”; “aquí nadie dimite para ser fiel a su palabra”, son algunas de las frases que destaca el libro. No suele suceder que un político derribe los lugares comunes de la complicada vida política de España y menos sin contar con el cobijo del aparato partidista, de ahí el título del libro.

Su llegada a la Secretaría General del PSOE en 2014, en plena crisis económica global, abrió una nueva época en la formación política. Transcurridos dos años, era expulsado públicamente —entre llanto— del liderazgo de su partido, al que regresó, aupado por la militancia, para ser investido presidente del gobierno un año después.

En cuestión de meses situó a España en primera línea de la defensa de valores y políticas progresistas, la justicia, el europeísmo, el feminismo y el ecologismo. Aunque hace unos días la derecha tumbó sus presupuestos por lo que no tuvo más remedio que convocar elecciones anticipadas, el 28 de abril, que le convertirá en el presidente con menos tiempo en el cargo (menos de un año).

En cualquier caso, ese recorrido vital lo narra el autor en Manual de resistencia como parte de un proceso personal de resiliencia, que no se entendería —dice— sin la fortaleza de sus convicciones. Ha sido un cuatrienio de aceleración en la política, donde todo se ha vuelto imprevisible.

Sin duda, el momento es histórico: la crisis catalana, los cambios en los partidos y el auge del autoritarismo otorgan a la política española una dimensión trascendental. En estas páginas, entreveradas de reflexiones políticas, acción, traiciones y coraje, el lector descubrirá, además, el lado más desconocido del presidente del gobierno.

Sánchez, casado y con dos hijas, es un amante del deporte, siempre practicó baloncesto y le gusta correr. Lo hace a diario en compañía de su perro antes y ahora en los jardines de la casa presidencial de La Moncloa.

Una de sus primeras medidas fue cambiar la prensa deportiva con la que Rajoy se desayunaba por prensa internacional. Sánchez, contrario a todos sus predecesores, es el presidente que habla más idiomas: inglés, italiano, francés y portugués. José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy no hablan ni lo más elemental de inglés.

En distancias cortas gana más, tiene cultura general y con él se puede hablar prácticamente de cualquier tema (muchos dirían que faltaría más, pero a veces algunos políticos sorprenden para mal). Es afable, sabe escuchar, aunque a veces le pierde el ímpetu, coinciden algunos analistas.

Según la Moncloa, el libro fue escrito en su mayor parte antes de llegar a ser presidente. Fue la secretaria de Estado de la España Global, Irene Lozano, quien dijo que únicamente se ha limitado a “dar forma literaria” al libro que “se está vendiendo muy bien”, pese a la campaña de desprestigio de algunos opositores.


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