La Fiscalía Anticorrupción de España ordenó el archivo de la investigación por el pago de comisiones millonarias tras la adjudicación del Tren de Alta Velocidad a La Meca (Arabia Saudí) por un consorcio empresarial español, en un hecho que se vinculó al rey emérito Juan Carlos I, tras unas grabaciones.
Estas diligencias, en las que se investigaba un presunto delito de corrupción en las operaciones comerciales internacionales, se iniciaron en 2018 después de que en una conversación grabada por el comisario jubilado José Manuel Villarejo, y la ex amante del rey emérito, Corinna Larsen, que afirmó que Juan Carlos I había cobrado una comisión millonaria como intermediario para que la obra fuera adjudicada a empresas ibéricas.
El Ministerio Público decretó el sobreseimiento de las actuaciones después de que Arabia Saudí respondiera, vía Comisión Rogatoria a este organismo, señalando que no hay indicios de delito alguno en la operación para para la construcción del AVE a La Meca y negándose a entregar a España la documentación bancaria que había sido reclamada por el fiscal Luis Pastor
La Fiscalía Anticorrupción abrió las diligencias en diciembre de 2018 para intentar aclarar el destino de 80 millones de euros que, según desveló Corinna, se habrían repartido -entre otros- el Rey emérito por la adjudicación del AVE a La Meca a empresas españolas en 2011.
En octubre de ese año, el Ministerio de Transportes de Arabia Saudí y el organismo gestor de los ferrocarriles de este país, el SRO, adjudicó al consorcio hispano-árabe de empresas Shoula Group, compuesto por 12 firmas españolas y dos saudíes, la fase II del proyecto Haramain High-speed Railway.
El contrato para la construcción de la segunda fase de las obras del AVE Medina-La Meca se firmó el 14 de enero de 2012 por 6 mil 487 millones 914 mil 772 euros.