Tenía 21 años. Era un joven católico que buscaba una mejor oportunidad laboral para su familia en Guatemala y decidió buscar el sueño americano al cruzar a Estados Unidos para ganar unos dólares. No era la primera vez que Francisco Gaspar Rojche Chiquival intentaba ingresar a territorio norteamericano, pues en 2017 quiso pasar, pero fue deportado.
Hace una semana salió de casa para volver a intentarlo, pero murió durante el incendio del 27 de marzo pasado en la estancia migratoria en el Puente Internacional Lerdo de Ciudad Juárez, Chihuahua, donde estaba retenido en espera de ser deportado a su casa en la localidad de Siete Vueltas.
Feliciana, su novia con quien mantenía una relación de cuatro años y que conoció en la iglesia, contó a MILENIO que Francisco Gaspar decidió intentar nuevamente trabajar en Estados Unidos, ya que la situación económica no iba bien. El joven trabajaba cortando limones.
Un video difundido en redes sociales reveló que personal del Instituto Nacional de Migración (INM) dejó encerrados a los indocumentados durante el incendio que dejó 38 muertos. “Lo que sabemos es que murió y no pudo escapar porque en el video que han subido, los guardias no los cuidaban. Sólo lo vimos en la lista de fallecidos que estaba él y su tío (Miguel Rojche)”, dijo.
La joven de 21 años también denunció que las autoridades de Guatemala no les han dado información sobre la repatriación del cuerpo e incluso, al parecer, les han pedido dinero para que éste les sea entregado. “No sé qué trámite hay que hacer para que su cuerpo venga, no sabemos”.
Francisco Gaspar Rojche Chiquival, dice, “era una muy buena persona” y su familia estaba sufriendo y “por eso se fue para allá” pues “aquí no se gana mucho, él se desesperó y por eso se fue” a Estados Unidos.
“El domingo me llamó y me dijo que estaba bien, que estaba comiendo, que estaba tranquilo y el lunes los iban a liberar y a regresar para Guatemala. Yo le decía que no importaba, que lo que importaba era que lo iban a regresar y desde ese domingo en la tarde ya no volví a recibir llamadas de él hasta enterarme ayer que me llamaron y me dieron la noticia de que él estaba muerto.”, contó Feliciana.
"Le dije que no viajara"
El joven, cuenta su novia, quería construir su casa y tener un negocio, pero ya no fue posible. El joven tenía un gusto por las motocicletas y “corría mucho” en rodadas. “Luchó para pagar su moto, trabajaba en una empresa, terminó de pagar su moto y lo despidieron, pero sí pudo comprar sus moto todavía”, expresa la joven.
Feliciana recuerda que Francisco Gaspar le contó que no estaría mucho tiempo en Estados Unidos pues sólo iría “para hacer lo necesario y pagar las deudas”, y una vez que volviera se casarían, ya que ya le había propuesto matrimonio.
“Lo único que me dijo es que ‘no voy a hacer mucho tiempo allá, voy a regresar, sólo voy a hacer lo necesario, pagar las deudas, construir nuestra casa, después voy a regresar y nos vamos a casar’, y lo único que me dijo antes de irse”, expresa llorando.
La joven tenía un presentimiento sobre el viaje de Francisco Gaspar Rojche Chiquival y le expresó que no se fuera; “le dije que no viajara, como que sí lo presentía”.
“Como él ya había regresado una vez y no pasó, le dije que no era su destino irse para allá. ‘Y fuiste una vez, ya probaste y no pudiste pasar, dale la oportunidad a alguien más de tu familia, pero tú no te vayas, luchemos aquí aunque poco ganemos, pero luchemos aquí’; yo lo presentí y no quería que él se fuera pero cuando se fue le pedí a Dios que lo cuidara y lo protegiera, siempre le desee lo mejor, nunca la muerte”.
Su novia tenía la esperanza de que su amor, como le decía de cariño, estuviera vivo al enterarse del incendio en las instalaciones migratorias, pero la información de qué había ocurrido era escasa. Ayer el Instituto Nacional de Migración (INM) dio a conocer la lista de las personas fallecidas, entre ellas él.
“Una compañera de él me escribió: ‘¿No sabes nada de Francisco?, en la bodega donde estaba se incendió’; me sentí mal, no lo creía, lo empecé a buscar pero no aparecían los nombres todavía y tenía la esperanza de que él fuera un herido, no un fallecido (…) recibí una llamada de un familiar de él diciéndome ‘lo siento mucho, tu novio ha muerto por el incendio’, fue muy duro para mí”, expresó.
Dinero para que el cuerpo regrese
Feliciana sostiene que Francisco Gaspar Rojche Chiquival “nunca fue una mala persona, él no merecía morir así” que “nunca estuvo en malos pasos y siempre estuvo trabajando para ganar un poco de dinero con la frente en alto y nunca hizo cosas malas”.
En tanto, hizo un llamado a que “los hombres que le hicieron eso y no le abrieron las rejas (de la estancia migratoria donde estaba pese al incendio) tienen que pagar; no tienen corazón y pudieron salvarse tantas personas inocentes, pero ellos no hicieron nada para ayudarlos”.
“Los hubieron regresado para Guatemala, pero no les hubieran hecho eso. Que no pidan dinero porque de verdad fue culpa de ellos porque no les abrieron para que pudieran salir y para qué andan pidiendo dinero para que el cuerpo regrese, eso no es justo (…) es lo que están pidiendo, mucho dinero”.
IR