El brazo armado del movimiento islamista palestino Hamás disparó varios cohetes contra la capital israelí Tel Aviv, en una escalada del conflicto que la diplomacia internacional intenta detener con nuevos esfuerzos para reanudar la negociación de una tregua.
Las sirenas de alarma resonaron en el centro de Israel por primera vez en meses.
Poco después, las brigadas Ezedin al Qasam, brazo armado de Hamás, afirmaron en Telegram que habían atacado Tel Aviv "con una importante andanada de cohetes en respuesta a las masacres sionistas contra civiles".
El Ejército israelí aseguró que se dispararon al menos ocho cohetes desde Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, donde sus fuerzas luchan contra combatientes islamistas palestinos. "Algunos cohetes fueron interceptados", precisó.
Horas antes, los bombardeos y los disparos de artillería israelíes habían golpeado el norte y el centro del territorio palestino, así como Rafah, ciudad en el extremo sur de la que han huido cientos de miles de palestinos.
La defensa civil gazatí afirmó que recuperó seis cuerpos tras un ataque aéreo contra una casa en el este de Rafah, donde Israel prosigue sus operaciones militares pese a que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) le ordenó el viernes suspenderlas en este sector.
Así fue el ataque:
"Diplomacia de emergencia"
Tras casi ocho meses de guerra, sigue aumentando la presión internacional e interna para que Israel alcance un acuerdo con Hamás que incluya la liberación de los rehenes que siguen en manos del movimiento islamista que gobierna la Franja de Gaza desde 2007.
Un alto funcionario afirmó que el gabinete de guerra israelí prevé reunirse el domingo por la noche para analizar los esfuerzos para liberar a los rehenes.
Otra fuente aseguró el sábado que el gobierno israelí tiene la "intención" de relanzar "esta semana" las negociaciones.
La CIJ, máxima instancia judicial de la ONU, también exigió la apertura del paso fronterizo entre Egipto y Gaza en Rafah, puerta de entrada de ayuda humanitaria que Israel cerró a principios de mes al iniciar sus operaciones en la ciudad.
Egipto, que se negaba a reabrir el paso de Rafah mientras las tropas israelíes controlaran el lado palestino, anunció que permitió el tránsito de camiones de ayuda a través del paso israelí de Kerem Shalom, según Al Qahera News.
En total, "200 camiones" abandonaron el lado egipcio del puesto fronterizo de Rafah para dirigirse hacia Kerem Shalom, indicó este canal cercano a los servicios de inteligencia egipcios, sin precisar cuantos camiones superaron los controles de seguridad para entrar en el territorio.
Ayuda humanitaria entra a cuentagotas en Gaza:
Egipto también declaró que proseguía "sus esfuerzos para reactivar las negociaciones" indirectas entre Israel y Hamás, añadió Al Qahera News.
Las negociaciones indirectas mediadas por Qatar, Egipto y Estados Unidos se estancaron a principios de mayo, poco después del inicio de las operaciones terrestres de Israel en Rafah.
Medios de comunicación israelíes indicaron que el jefe del Mosad (el servicio de inteligencia), David Barnea, acordó durante reuniones en París con el director de la CIA, William Burns, y el primer ministro qatarí, Mohamed bin Abdulrahman al Thani, un nuevo marco para las conversaciones.
Palestinos junto a un misil que no explotó:
El presidente estadunidense, Joe Biden, afirmó estar "comprometido en una diplomacia de emergencia" para intentar conseguir un alto el fuego y la liberación de los rehenes.
Funcionarios qataríes tienen previsto reunirse con una delegación de Hamás en los próximos días, según la web de noticias estadunidense Axios.
Bombardeo "intensivo"
La guerra estalló el 7 de octubre, cuando comandos islamistas de Hamás mataron a más de mil 170 personas, en su mayoría civiles, en el sur de Israel, según un balance de la AFP basado en datos oficiales israelíes.
Los milicianos también secuestraron a 252 personas. Israel afirma que 121 permanecen secuestradas en Gaza, de las cuales 37 habrían muerto.
En respuesta, Israel prometió "aniquilar" a Hamás y lanzó una ofensiva contra la Franja de Gaza, en la cual han muerto hasta el momento 35 mil 984 palestinos, en su mayoría civiles, según el ministerio de Salud del territorio palestino, gobernado por el movimiento islamista.
En el sur, el Ejército israelí inició el 7 de mayo operaciones terrestres en algunos sectores de Rafah, donde afirma que se encuentran los últimos bastiones de Hamás, considerado como una organización terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea.
Unas 800 mil personas huyeron desde ese día de la ciudad, según la ONU, que advierte de la catastrófica situación humanitaria en toda la Franja de Gaza, con riesgo de hambruna y hospitales fuera de servicio debido al asedio de Israel.
SNGZ