A dos años de cárcel fue condenado en España una persona conocida como "el hombre de los dos mil tumores", quien en 2010 inició una campaña en la que participaron diversas celebridades para ayudarlo a financiar un supuesto tratamiento debido a que, según su versión, le quedaban meses de vida.
El hombre, identificado como Paco Sanz, llegó a recaudar 264 mil 780 euros (más de 6 millones 400 mil pesos) con la excusa de que necesitaba recursos para someterse a un tratamiento experimental contra el supuesto cáncer en fase terminal que padecía.
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Entre 2010 y 2017 era recurrente verlo en televisión y redes sociales donde logró convencer a miles de personas y varias celebridades para que le den aportaciones.
El hombre decía que le quedaban tan solo meses de vida debido a una enfermedad genética, que sí padece y le fue diagnosticada en 2009, llamada síndrome de Cowden, que le supuso la aparición de "dos mil tumores".
El punto era que, en realidad, los tumores eran benignos y no le representaban un peligro para su vida.
"Aprovechándose de su enfermedad, urdió un plan para obtener un lucro patrimonial ilícito entre los años 2010 y febrero de 2017", señaló la fiscalía en un documento.
Con un sitio en internet, una asociación que se inspiraba en su nombre, mensajes de texto que instaban a colaborar, una cuenta en Paypal y una gala para recaudar fondos, Sanz no desaprovechó ningún medio para obtener recursos.
La fiscalía agrega que Sanz alegaba que "su enfermedad revestía una gravedad mucho mayor que la que realmente tenía" y "que la única manera de salvarse" era mediante un tratamiento experimental disponible solamente en Estados Unidos.
En realidad, se trataba de "un ensayo experimental gratuito y sin coste alguno para éste, pues los costes del ensayo eran cubiertos por la entidad promotora del ensayo", sostuvo la autoridad.
Al abrirse el proceso hoy, Paco Sanz se declaró culpable y llegó a un acuerdo con el tribunal en el que aceptó dos años de prisión, frente a los seis que pedía la fiscalía. Su pareja, cómplice de la estafa, recibió un año y nueve meses de cárcel.
De todas maneras, evitarán las rejas puesto que en España no suelen ejecutarse las condenas de dos años o menos para personas sin antecedentes.
El proceso continuará otros tres días para abordar el aspecto civil del caso, y determinar el monto económico de los daños que podría tener que pagar.
OMZI