Milton tendrá impacto en las elecciones presidenciales
Cuando un huracán azota Estados Unidos en plena campaña electoral, los candidatos se ven forzados a demostrar que pueden ser grandes líderes en tiempos de crisis: una buena gestión puede tener una gran recompensa política, pero minimizar el desastre puede costarles caro.
Estados Unidos se enfrenta este miércoles a la llegada del poderoso huracán Milton por la costa oeste de Florida, solo dos semanas después de que el huracán Helene dejara 232 muertos y una estela de devastación de 800 kilómetros en varios estados, incluidos Georgia y Carolina del Norte.
Tanto la vicepresidenta, la demócrata Kamala Harris, como su rival para los comicios del 5 de noviembre, el ex mandatario republicano Donald Trump (2017-2021), son conscientes del impacto que los desastres naturales han tenido en elecciones durante décadas y de la importancia de definir la narrativa en torno a ellos lo antes posible.
Trump, experto en manejar a su favor la atención mediática, se adelantó a Harris y al propio presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tras el paso de Helene, siendo el primero en visitar una zona afectada por el desastre: el estado de Georgia, clave para los comicios.
Trump en Georgia:
De inmediato, acaparó los medios con afirmaciones falsas, asegurando que el Gobierno federal no estaba respondiendo a las peticiones de los gobernadores y alegando que la Agencia Federal de Emergencias (FEMA) no estaba asistiendo a los damnificados porque había gastado sus fondos en ayudar a migrantes.
Por su parte, Harris ha optado por un enfoque institucional, pidiendo dejar la política a un lado para centrarse en los afectados. Sin embargo, ha asumido un papel más visible que en otras ocasiones, visitando zonas devastadas en Georgia y llamando directamente a los gobernadores.
Además, Biden anunció ayer martes la suspensión de su viaje a Alemania y Angola por el huracán Milton. No habría sido una buena imagen ni para él ni para Harris que estuviera en el extranjero mientras el huracán golpeaba Florida.
La realidad es que, aunque los huracanes escapan del control humano, los votantes suelen examinar con lupa cómo los políticos ofrecen ayuda y pueden llegar incluso a cambiar su voto, según John Gasper, profesor de la Carnegie Mellon University, quien ha estudiado estos acontecimientos.