La Iglesia católica de España se someterá a una auditoría independiente sobre los abusos sexuales a menores cometidos en su seno, según informó la Conferencia Episcopal Española.
El presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Juan José Omella, y el presidente de la firma legal Cremades&Calvo Sotelo, Javier Cremades, darán a conocer los detalles de esta auditoría mañana.
El despacho profesional abrirá un cauce independiente para recibir eventuales denuncias, revisará los procedimientos jurídicos tendentes a sancionar las prácticas delictivas y ofrecerá su colaboración a las autoridades para ayudar a esclarecer los hechos y establecer un sistema de prevención que satisfaga las demandas sociales al respecto, según dieron a conocer las partes en un comunicado.
En días pasados, el Congreso de los Diputados dio trámite a la petición de los partidos de izquierda Podemos, Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) y Bildu de crear una comisión de investigación sobre los abusos a menores por parte de miembros de la Iglesia.
No obstante, esto es un primer paso, ya que, una vez superado el primer trámite, la creación de la comisión se deberá votar en el Pleno, donde deberá recibir un apoyo mayoritario del arco parlamentario.
Con todo, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) deberá guardar un equilibrio que se antoja difícil. Y es que, votar a favor de la comisión podría suponer una ruptura con la Conferencia Episcopal, con la que el Gobierno quiere mantener una relación estable.
Sin ir más lejos, hace dos semanas, gobierno e Iglesia llegaron a un acuerdo para la devolución de mil bienes que la iglesia se agenció sin pertenecerle entre 1998 y 2005.
Hasta ese momento, la Conferencia Episcopal se negaba a investigar los presuntos abusos, como sí se ha hecho en Italia o en Francia, que ha cifrado en 216 mil los menores que sufrieron abusos sexuales por parte de curas y religiosos. Ahora las cosas han cambiado.
Esta comisión tiene su origen en las más de 250 denuncias que el periódico El País entregó al Vaticano y a la propia Iglesia española. Incluso el papa Francisco pidió investigar lo ocurrido en este país.
KGE