Israel comenzó hoy la campaña masiva de vacunación contra el coronavirus con el objetivo de inyectar a 60 mil personas al día, priorizando a los grupos de más riesgos ante la pandemia, la cual se está expandiendo con gran velocidad entre su población.
Los primeros en la lista de vacunados son trabajadores sanitarios, seguidos por ancianos, personas de riesgo y mayores de 60 años. El país afirmó que consiguió dosis suficientes de los fármacos de Pfizer y Moderna, esta última empresa contó el viernes con la autorización de para usarse de emergencia en Estados Unidos.
- Te recomendamos FDA aprueba uso en EU de vacuna contra el coronavirus de Moderna Estados Unidos
Según algunas encuestas, muchos habitantes de Israel se muestran reacios a vacunarse ya, lo que generó que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, decidiera dar un “ejemplo personal” e insistió en ser el primer israelí vacunado, siendo inoculado anoche.
Netanyahu dijo confiar en la vacuna antes de subirse la manga de la camiseta negra y recibir la inyección. Lo describió como un “momento emocionante” que pondría a Israel camino de retomar sus rutinas normales. También el ministro de Salud del país se vacunó ayer.
Israel tiene un acuerdo con Pfizer para adquirir 8 millones de esa dosis creada de forma conjunta con la empresa BioNTech, lo que hace suficiente para la mitad de la población de ese país, ya que cada persona necesita dos dosis. La nación generó otro acuerdo para comprar 6 millones de dosis de su medicamento, suficiente para otros tres millones de habitantes.
Los datos de nuevos contagios están subiendo y ahora se acercan a los 3 mil diarios. Los líderes israelíes debaten de nuevo si imponer el tercer confinamiento nacional desde que comenzó la pandemia. Muchas de las restricciones de la segunda cuarentena, declarada en otoño, seguían en vigor, como el cierre de la mayoría de los hoteles y restaurantes que sirven sólo comida a domicilio y para llevar. El desempleo se mantenía por encima del 10 por ciento.
Israel ha tenido resultados dispares en su lucha contra el virus. Netanyahu fue elogiado en primavera por cerrar fronteras y confinar al país con rapidez, una decisión que asestó un golpe a la economía pero redujo los contagios.
Sin embargo, una reapertura apresurada y errática disparó los casos nuevos al final del verano, provocando lo que entonces era uno de los peores brotes del mundo.
Israel ha reportado más de 368 mil contagios confirmados por coronavirus y más de 3 mil muertes asociadas al covid-19 desde el inicio de la pandemia.