Venezolanos cruzan frontera con Colombia para conseguir vacunas contra el covid-19

Los venezolanos aseguraron que buscan conseguir las vacunas que no fueron aprobada en su país, afirman que desconfían de las vacunas chinas y cubanas.

Los venezolanos desconfían de las vacunas contra covid-19 que están en su país. (AP)
Editorial Milenio
Villa del Rosario, Colomba /

Xiomara Ruiz despertó antes del amanecer y abordó el autobús con su hijo en un viaje de una hora al puente que conecta Venezuela con Colombia, el cual luego cruzan a pie. Su meta: que el niño de ocho años reciba una vacuna contra el coronavirus.

Para las 7:00 de la mañana, la enfermera de 27 años y su hijo hacían fila en un centro de vacunación de Villa del Rosario, un poblado colombiano que hace frontera con Venezuela.

Cerca de dos docenas de venezolanos también estaban formados para recibir la vacuna cuando un voluntario vistiendo una camiseta color caqui pidió a la multitud desde un altavoz que guardara distancia mientras esperaba que el centro de vacunación abriera sus puertas.

Hasta hace unas semanas se volvió a reabrir la frontera entre Venezuela y Colombia. (AP)
"Donde yo vivo todavía no están ofreciendo la vacuna para los niños menores de 12 años", afirmó Ruiz, que viajó a Colombia desde el estado venezolano fronterizo de Táchira. A ella le preocupaba por un anuncio reciente del gobierno de Venezuela de que los niños menores de 12 años recibirán la vacuna Soberana contra el coronavirus desarrollada en Cuba. "Dicen que va a llegar la cubana pero esa no está aprobada por la Organización Mundial de la Salud", subrayó Ruiz. "Es mejor venir acá".

Cientos de venezolanos han estado viajando recientemente a Colombia en busca de vacunas contra el covid-19 en un momento en que Venezuela batalla para conseguir las dosis suficientes para su población.

Estos viajes reproducen los esfuerzos previos de venezolanos que buscaron atención médica en el extranjero al tiempo que el sistema sanitario del país se venía derrumbando por años de escasez de medicamento, recesión económica y una mala gestión de los hospitales públicos.

Sin embargo, las restricciones de viaje y las normativas relacionadas con la pandemia han complicado las cosas a los venezolanos para que puedan vacunarse en Colombia.

Los estados fronterizos colombianos, que han proveído a miles de niños venezolanos vacunas gratuitas contra el tétanos, la difteria y la hepatitis comenzaron apenas en octubre a proporcionar las vacunas contra el coronavirus a viajeros venezolanos.

El gobierno venezolano asegura que ha vacunado a la mayoría de la población, pero de acuerdo con informes, sólo ha sido un tercio. (AP)

Ahora que las puertas están abiertas, muchos están aprovechando la oportunidad para vacunarse en Colombia, que tiene mayor acceso a las vacunas europeas y estadunidenses además de que sólo aplica las aprobadas por la OMS.

"En Venezuela la cobertura es muy baja", dijo Huniades Urbina, pediatra y vocero de la Academia Nacional de Medicina de Venezuela. "Para muchos, especialmente quienes viven en estados fronterizos, les es más fácil vacunar a sus hijos en Colombia que ir varias veces a centros de vacunación en Venezuela a ver si hay algo".

En el departamento colombiano de Norte de Santander, donde se ubica el principal cruce fronterizo, más de 34 mil personas que se registraban en centros de vacunación con carnet de identidad venezolano han sido inoculados desde el 25 de octubre, cuando comenzó la vacunación para las personas no residentes, según las autoridades locales de salud. La cifra incluye migrantes sin documentos que viven en Norte de Santander así como venezolanos que solo viajaron para recibir la vacuna.

En Cúcuta, capital de Norte de Santander, el número de vacunas aplicadas a diario se ha duplicado a 9 mil desde finales de octubre, afirmó Astrid Urbina, la enfermera encargada del programa de vacunación en la ciudad.

Algunos venezolanos que viajan a Colombia en busca de la vacuna dijeron que quieren inocularse con las marcas europeas y estadunidenses que no están disponibles en Venezuela por diversas razones, entre ella la falta de permisos del gobierno, de infraestructura para las vacunas que deben ser almacenadas en temperaturas ultra frías y las sanciones que Estados Unidos impuso a las compañías que hacen negocios con el gobierno de Venezuela.

Los venezolanos que han cruzado la frontera con Colombia desconfían de las vacunas fabricadas en China y Cuba. (AP)

Sin embargo, en junio, el Tesoro de Estados Unidos anunció una dispensa para las compañías que vendan vacunas y equipo relacionado con la pandemia al gobierno venezolano.

Eduardo Sánchez, un habitante de 22 años de la localidad fronteriza venezolana de San Antonio, cruzó el viernes el puente internacional que conecta a ambos países cuando se enteró que podría conseguir que lo inocularan con la vacuna de AstraZeneca en territorio colombiano.

"Allá llegaron las vacunas chinas, pero no confío en esas", afirmó. "Acá por lo menos sé que es la AstraZeneca y esa tiene como más reconocimiento".

Venezuela ha vacunado totalmente a 32 por ciento de su población a la fecha, según información del país facilitada a la Organización Panamericana de la Salud. El país, de 28 millones de habitantes, ha conseguido importar vacunas de China, Rusia y en fecha más reciente de Cuba, pero continúa teniendo una de las tasas de vacunación más bajas en Sudamérica.

El 21 de octubre, la canciller venezolana Delcy Rodríguez anunció que 12 millones de dosis de la vacuna Soberana de Cuba serían importadas y aplicadas en las escuelas a niños de dos a 12 años. Dijo que la medida demostraba que el presidente Nicolás Maduro "se preocupa por la salud y la vida de nuestro pueblo" y los beneficios de la alianza de larga data entre Cuba y Venezuela.

También, los venezolanos cruzan la frontera para que los niños sean vacunados contra el covid-19. (AP)

Sin embargo, las asociaciones médicas en Venezuela se han manifestado en contra de que se aplique la vacuna cubana a los niños y argumentan que no ha sido ampliamente examinada por los científicos fuera de la isla.

Las autoridades colombianas en Norte de Santander señalaron que el número de venezolanos que acuden a vacunarse aumentó desde el 3 de noviembre, cuando el departamento comenzó a inocular a niños de más de tres años.

Antonio Niño, un chofer proveniente de la localidad de Rubio, llevó a su hija Nicole, de ocho años, a que la inocularan.

"Preferimos mi esposa y yo venir acá para inyectarle a la niña una vacuna mejor", señaló. "Las de acá ya están aprobadas por la OMS y eso nos da más seguridad".

dmr

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.