Acompañado de su esposa Melania, Donald Trump prendió la mecha de las redes sociales desde la mañana del día de la elección presidencial. Luego de depositar su voto en una casilla del Mandel Recreation Center de Palm Beach, el republicano regañó a un reportero que le preguntó si había apoyado la medida sobre la interrupción del embarazo en Florida.
–Deberías dejar de hablar de eso –dijo visiblemente irritado.
Las referencias al enfado, acompañadas de fotografías y videos, empezaron a galopar en Facebook, Instagram, X (antes Twitter), TikTok y YouTube, colocando este tópico como el principal eje de las conversaciones durante la jornada electoral.
De acuerdo con un reporte de MilenIA, Central de Datos e Inteligencia Artificial, los estadounidenses se volcaron a hablar del aborto en redes sociales, superando otros tópicos como la derecha extrema, los migrantes o el racismo, los cuales mostraron más fuelle durante los últimos dos meses.
El análisis de 900 millones de interacciones digitales señala que el 58 por ciento de los comentarios, reacciones y mensajes compartidos incluían posicionamientos sobre la interrupción del embarazo: el 65 por ciento se manifestaron en contra, mientras que sólo 25 por ciento se expresaron a favor.
La jugada del republicano –haiga sido espontánea o deliberada– logró un efecto de robo de balón al equipo demócrata, ya que Kamala Harris había logrado que el derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo fuera uno de los temas centrales de su campaña electoral.
Durante los últimos dos meses, el 45 por ciento de los estadounidenses se pronunciaron a favor y 45 por ciento en contra. Pero en el Día D, el importante, los conservadores tomaron por asalto el control de una de las conversaciones digitales más polarizantes. Así, las críticas al aborto dieron ayer una zancada de 20 puntos porcentuales, al tiempo que los apoyadores disminuyeron en esa misma proporción.
¿Estrategia? ¿Suerte? Lo cierto es que ese tema incendió la pradera de las redes sociales en el mero día de las elecciones, como desde hace mucho tiempo no ocurría. Del 5 de noviembre de 2023 a la fecha, las conversaciones digitales sobre la interrupción legal del embarazo crecieron 28 por ciento. Pero ese meritito día, el 5 de noviembre de 2024, el aborto se fue al cielo. La aguja de Google Trends Estados Unidos marcó 100%.
Avanza discurso conservador
Luego de las interacciones sobre el aborto (150 millones), los estadounidenses se decantaron por debatir sobre la extrema derecha, un tema que acaparó 39 millones de menciones en redes sociales. Las animadversiones y las reivindicaciones hacia esta posición política quedaron empatadas: 45 vs 45 por ciento.
Ayer, las críticas a los ultras disminuyeron 15 puntos con respecto a los dos meses anteriores, cuando promediaron 60% de manifestaciones de rechazo.
Y aunque la situación de los migrantes fue uno de los asuntos más recurrentes durante las actividades proselitistas de Trump y Harris, en el día de la elección este tema se limitó a captar la atención de 37 millones de usuarios de Facebook, Instagram, X, TikTok y YouTube. El 55% se manifestó en contra y el 40% a favor.
El racismo fue otro de los tópicos del Día D, provocando 31 millones de reacciones sociodigitales. A pesar de que un 65% de los estadounidenses repudian este tipo de expresiones, el 30% las respaldan.
Al final de la jornada, la narrativa conservadora se impuso sobre los discursos liberales asociados a la candidata demócrata. Los republicanos lograron posicionar sus puntos de vista, sobre todo los que tienen que ver con el aborto. En este terreno, los rojos se impusieron a los azules.
Kamala mejora, pero Donald no pierde
Aunque los negativos de Harris pasaron de 70 a 55 por ciento y los repudios a Trump aumentaron de 68 a 70 por ciento, las diferencias no parecieron mover las cosas. La demócrata mejoraba 18 puntos con respecto al promedio de los dos últimos meses, pero el republicano sólo perdía dos. El eje de la conversación seguía siendo él: 290 millones de referencias rojas versus 257 millones de menciones azules.
Las expresiones positivas hacia Kamala tampoco ayudaron mucho: pasó de 22 a 40 por ciento, un salto de 18 buenos puntos. Mas sin embargo, Donald resistía: bajó de 27 a 25 por ciento. Nada.
Aquella frase de la mañana –“Deberías dejar de hablar de eso”– terminó siendo el tema de conversación. Medio mundo digital habló del aborto, y no para bien… de Kamala. Y de los derechos reproductivos de las mujeres estadunidenses.
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*Con información de Omar Cordero/MilenIA