El presidente ejecutivo de Nestlé, Mark Schneider, fue destituido en un movimiento repentino por parte del mayor fabricante de alimentos del mundo como resultado de los malos resultados del grupo, dijeron tres fuentes conocedoras del asunto a Reuters el viernes.
Nestlé NESN.S anunció la salida de Schneider a última hora del jueves, tras una reunión del consejo de administración, y nombró al veterano de la compañía Laurent Freixe como nuevo CEO. De esta forma, Schneider, un alemán de 58 años, puso fin a un mandato de casi ocho años en el que se convirtió en la primera persona ajena a la compañía que la dirige en casi un siglo.
La empresa se negó a dar más detalles, aparte de los comentarios realizados en una convocatoria de inversores el viernes, en la que el presidente Paul Bulcke dijo que el consejo evaluó el entorno actual junto a Schneider y acordaron juntos hacer el cambio.
Schneider no respondió de inmediato a las peticiones de Reuters para hacer comentarios.
Bruno Monteyne, analista de Bernstein, dijo que Schneider dejó claro recientemente que esperaba quedarse a largo plazo. Lo repentino del cambio "es otra señal de que no se trata de una transición planificada. Está claro que tampoco es su elección, pues de lo contrario probablemente habría logrado una transición más suave", afirmó.
Las acciones de Nestlé alcanzaron un máximo histórico en enero de 2022, cuando el grupo disfrutó de un auge impulsado por la pandemia, pero están declinando desde mayo de 2023 por una serie de contratiempos, ganancias fallidas y rebajas de orientación.
La relación precio/beneficios de Nestlé, utilizada para medir el valor relativo de las acciones de una empresa, es de 17,7, frente a más de 25 en junio de 2022. Es superior a la media del sector de bienes de consumo (10), pero inferior a la de su rival Unilever (18,5).
Las acciones bajaban cerca de un 1,8 porciento en el día, entre las que más caían en Europa .STOXX, lo que demuestra la inquietud de los inversores por el inesperado cambio de presidente ejecutivo.
YRH