La Unión Europea, con Alemania a la cabeza, y Rusia rechazaron firmemente ayer las sanciones estadunidenses contra el gasoducto ruso-europeo Nord Stream 2, en el centro de una batalla económica y geopolítica entre Washington y Bruselas.
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Las sanciones, firmadas el viernes por el presidente estadunidense Donald Trump, “afectan a empresas alemanas y europeas y constituyen una injerencia en nuestros asuntos internos”, reaccionó Ulrike Demmer, una portavoz de la canciller alemana Angela Merkel.
“El gobierno rechaza estas sanciones extraterritoriales”, insistió Demmer en un comunicado. Alemania es el principal beneficiario del proyecto.
Por su parte, un portavoz de la UE expresó la oposición de Bruselas “por principio a la imposición de sanciones contra empresas europeas que llevan a cabo actividades legales”.
Primera consecuencia de las medidas: la empresa suiza Allseas, que posee el mayor barco del mundo para instalar conductos y fue contratada por el grupo ruso Gazprom para construir la sección extraterritorial del gasoducto, anunció en un comunicado la suspensión de los trabajos.
La empresa afirma que espera ahora “aclaraciones reglamentarias, técnicas y medioambientales por parte de las autoridades estadunidenses competentes”.
El anuncio pone en tela de juicio el futuro de esta gigantesca inversión de unos 11 mil millones de dólares, casi terminada y cuya entrada en servicio estaba programada para fines de 2019 o, más probablemente, inicios de 2020.
Nord Stream 2 confirmó la suspensión de los trabajos de Allseas. “Con todas las empresas que apoyan el proyecto, trabajaremos para terminar el gasoducto lo más pronto posible”, indicó un portavoz de la empresa en un comunicado.
Las sanciones incluyen la congelación de activos y la revocación de visas de Estados Unidos para los empresarios ligados al gasoducto. El Departamento de Estado ahora debe comunicar los nombres de las empresas y las personas interesadas en un plazo de 60 días.
INCOMPRENSIBLES
Moscú también criticó la aprobación de las sanciones, denunciando "la ideología estadunidense que no soporta la competencia mundial".
“Un Estado con una deuda pública de 22 billones de dólares prohíbe a países solventes desarrollar su economía real”, declaró Maria Zajarova en su página Facebook.
"Pronto [Estados Unidos] pedirá que dejemos de respirar", agregó la portavoz.
Construido en más del 80 por ciento, el gasoducto submarino tiene como objetivo duplicar las entregas de gas natural ruso a Europa, vía la principal economía de Europa, Alemania.
Pero para Washington y algunos países europeos (Ucrania, Polonia y los países bálticos) este gasoducto aumentará la dependencia de los europeos del gas ruso, lo que Moscú podría utilizar para ejercer presiones políticas.
Y ADEMÁS
ABE CONVERSA CON TRUMP SOBRE IRÁN
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, conversó ayer sobre los recientes acontecimientos en Irán y Corea del Norte con el presidente estadunidense Donald Trump durante una larga llamada telefónica, informó la agencia de noticias Kyodo. La conversación fue a iniciativa de Trump y se produjo el mismo día en que el mandatario iraní Hasan Rohani cerraba una visita de dos días a Japón.
Irán sufrió recientemente una intensa oleada de protestas a causa del aumento del precio de la gasolina, provocado por las sanciones que aplica Estados Unidos.
Japón es un aliado clave de Estados Unidos y también mantiene vínculos diplomáticos y económicos con Irán. Abe ha intentado en el pasado acercar posiciones entre ambos gobiernos.
Abe no mencionó Irán en un encuentro con reporteros, poco antes de medianoche el sábado, pero una fuente gubernamental mencionó a Kyodo que el tema sí fue abordado con Trump durante la conversación, que duró 75 minutos.