Nicholas Scott Spencer y su esposa, Mackenzie Leing Mathias, fueron sentenciados a pagar una indemnización de 100 millones de chelines ugandeses (alrededor de 470 mil pesos mexicanos) tras declararse culpables de tortura y abandono infantil de su hijo adoptivo en este país, entre otros cargos.
El niño de 10 años, quien fue adoptado en este país africano, habría sido reclutado, transportado y mantenido en una posición de vulnerabilidad con fines de explotación entre diciembre de 2020 y diciembre de 2021 en la zona de Naguru, en Kampala.
"El niño necesitaba ayuda y apoyo, ya que había perdido a su padre y había sido abandonado por su propia madre", afirmó la jueza Alice Komuhangi, encargada del caso.
El niño, cuya identidad fue protegida, fue trasladado a un hogar infantil a la espera de que se nombre un administrador, a quien se le dará acceso al dinero para cuidar del menor.
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Por otra parte, el marido fue multado con 15 millones de chelines (unos 7 mil pesos mexicanos), mientras su mujer recibió una multa de 3.36 millones de chelines (unos 16 mil pesos).
La indemnización fue el resultado de un acuerdo de culpabilidad, que también llevó al tribunal a retirar los cargos de trata agravada y tortura contra la pareja, detenida el año pasado, que podrían haberlos condenado a cadena perpetua o a la pena de muerte.
Ambos se declararon este martes culpables ante el Tribunal Superior de Kampala de tortura infantil, abandono infantil, estancia ilegal en Uganda y empleo sin permiso de trabajo, entre otros cargos.
aag