Amnistía Internacional reclamó al gobierno de Israel por el plan de anexionar partes de Cisjordania, calificando a ocupación de "ilegal" y de promover "la ley de la jungla", ya que la decisión del primer ministro Benjamin Netanyahu podría generar consecuencias imprevisibles para la paz en la región.
La organización internacional pidió acciones concretas a la comunidad internacional contra la medida unilateral, así como contra la iniciativa de paz de Estados Unidos, que autoriza la anexión de un 33 por ciento del territorio de Cisjordania, incluido el Valle del Jordán y colonias israelíes.
"La ley internacional es perfectamente clara: una anexión es ilegal", declaró el subdirector regional de Amnistía Internacional, Saleh Higazi, y alertó de que el plan "más bien apunta a la 'ley de la selva' que no debería tener lugar hoy en nuestro mundo". Además, pidió a la comunidad internacional que trabaje para "detener inmediatamente la construcción o expansión de asentamientos ilegales israelíes e infraestructuras en los territorios palestinos ocupados", prohibidos por la Cuarta Convención de Ginebra.
Asimismo, pide rechazar tanto esta acción como el llamado "Acuerdo del Siglo" del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y cualquier propuesta que, entiende, "socava los derechos inalienables del pueblo palestino, incluido el derecho al retorno de los refugiados palestinos".
“Los asentamientos se crean con el único propósito de establecer permanentemente a israelíes judíos en tierras ocupadas; esto es un crimen de guerra según el derecho internacional y la 'anexión' no es pertinente con esta determinación legal", remarcó Higazi, y que la anexión "afianzaría las políticas de discriminación institucionalizada y violaciones masivas de los derechos humanos que los palestinos enfrentan en los territorios como resultado de la ocupación".
Netanyahu ve anexión de Cisjordania como "oportunidad histórica"
Según el acuerdo suscrito en mayo entre Netanyahu y su antiguo rival electoral, Benny Gantz, su gobierno de unión se pronunciará sobre la aplicación del plan estadunidense de paz para Oriente Medio, que prevé entre otros, la anexión por Israel de colonias de judíos, consideradas ilegales por el derecho internacional, y el valle del Jordán en Cisjordania ocupada.
¿Por qué la anexión de Cisjordania por Israel?
El 28 de enero, Donald Trump, al lado de Netanyahu, reveló en Washington su plan para resolver el conflicto israelo-palestino partiendo de la situación en el terreno y no, como era el caso hasta ahora, del derecho internacional y las resoluciones de la ONU.El plan, aplaudido por Israel, propone estas medidas como parte de un "acuerdo de paz israelo-palestino".
Su proyecto prevé la anexión por Israel del Valle del Jordán, bajo control militar israelí, y de un centenar de colonias israelíes en Cisjordania. El plan, que exige una "solución realista de dos Estados", también prevé la creación de un Estado palestino desmilitarizado en un territorio reducido, sin Jerusalén Este como capital y bajo ciertas condiciones.
Este plan, que es rechazado de plano por los palestinos, es visto por Netanyahu como una "oportunidad histórica". El primer ministro se reunió el martes en Jerusalén con Avi Berkowitz, consejero especial del presidente Donald Trump, y David Friedman, embajador de Estados Unidos en Israel.
"Hemos hablado de la cuestión de soberanía, en la que estamos trabajando estos días, y sobre la que continuaremos trabajando en los próximos días", afirmó el primer ministro en un comunicado. El término "soberanía" se utiliza en Israel en referencia a la anexión.
En las últimas semanas, el primer ministro no ha dejado entrever sus intenciones, mientras algunos observadores barajan que el gobierno podría atrasarlo o empezar a anexar solo algunas colonias o bloques de colonias como Maale Adumim, Gush Etzion o Ariel.
Benny Gantz, actual ministro de Defensa, aseguró que la fecha del 1 de julio no es "sagrada" y priorizó la gestión de la pandemia del nuevo coronavirus. Y es que tras controlar en un primer momento la pandemia, Israel registra actualmente un aumento del número de casos.
"Todo lo que no esté relacionado con la batalla contra el coronavirus esperará hasta después del virus", dijo el lunes Benny Gantz, unas declaraciones a las que los servicios de Netanyahu no reaccionaron.
En este contexto de crisis sanitaria, solo el 5 por ciento de los israelíes consideran que la anexión debe ser la prioridad del gobierno, según un reciente sondeo del canal Keshet 12.
"Uno puede preguntarse, en este caso, por qué Netanyahu promocionaría su proyecto, si la opinión pública tiene tan poco interés", dice Yohanan Plesner, presidente del Israel Democracy Institute, un centro de investigación de Jerusalén.
Críticas de Palestina, la ONU y la Unión Europea
Netanyahu no puede desoír las críticas a su proyecto en el extranjero. El lunes, la ONU denunció de nuevo el plan israelí, alertando sobre las "ondas de choque (que) durarán décadas y serán sumamente perjudiciales para Israel y para los palestinos".
La Unión Europea emprendió una ofensiva diplomática para tratar de disuadir a Israel de que prosiga con su proyecto de anexión, pero no parece que pueda amenazar al país con sanciones ya que esto exigiría la unanimidad de sus Estados miembros.
Los países árabes han indicado por su parte que una anexión amenazaría a la región con un "conflicto mayor" y pondría fin a las ambiciones israelíes de "normalizar" las relaciones con los Estados árabes del Golfo.
En Ramalá, la Autoridad Palestina ya ha puesto fin a la cooperación en materia de seguridad con Israel y ha repetido que cualquier anexión anularía los acuerdos con el Estado hebreo. Sin embargo, el lunes aseguró que está dispuesta a reanudar las negociaciones bilaterales.
Pese a las críticas, Netanyahu podría seguir adelante con el proyecto cueste lo que cueste, dejando un legado político.
"Una primera explicación podría ser querer desviar el debate hacia otro asunto diferente al de la inculpación de un primer ministro" por la justicia, estima Plesner, al referirse a los problemas judiciales de Netanyahu, cuyo juicio por corrupción se inició a finales de mayo.
Otra explicación sería la voluntad de Netanyahu, el primer ministro que más tiempo ha permanecido en el puesto en la historia de Israel, de mantener el poder.
"Netanyahu se pregunta: '¿cómo hacer para seguir como primer ministro'"?, asegura Erez Yaacobi, experto en psicología política. "Sabe que la anexión es importante para la derecha, su base electoral. Estratégicamente, si no anexiona, tendrá un problema con sus electores". "Quiere dejar algo detrás en el momento en que se retire o muera". En este caso, la "anexión será para siempre la de Netanyahu".
dmr