Amenazas de muerte, ataques racistas, invitaciones para que se regrese “a su país”, es parte de lo que ha enfrentado en horas recientes el mexicano Omar Rivero creador de Occupy Democrats, la página de temas políticos más exitosa en la red social Facebook, al menos en los Estados Unidos. Sin embargo, fue gracias a su nuevo producto al que llamó Tribel, que las y amenazas se multiplicaron sobre este emprendedor nacido en Puebla y el cual tiene semanas cazando usuarios molestos por la inminente compra de Twitter por parte de Elon Musk.
“Las amenazas de muerte se están poniendo muy serias, al grado de que a algunos los he reportado con el FBI” dice a MILENIO Omar desde su casa en Florida. “Andan investigando dónde vivo, o la dirección de alguien que conozco, y lo que más les molesta es que sea inmigrante mexicano, aunque en realidad tenga la doble nacionalidad, ya que mi madre es estadunidense”, aclara.
Aunque no lo ha mencionado en esta fase final de la compra de Twitter, Musk llegó a insinuar que, una vez finiquitada la transacción, va a permitir el retorno de polémicas figuras como el ex presidente Donald Trump y la congresista republicana Marjorie Taylor Green, expulsadas de la red del pájaro azul por difundir mentiras y discursos de odio.
Al hablar de amenazas, Omar Rivero apunta sobre todo a seguidores de Donald Trump que se han suscrito a Tribel buscando difundir el supremacismo blanco y que al instante han sido expulsados sin posibilidad de redención.
“Están enojados porque piensan que yo los estoy censurando, pero yo no hago eso, sino el sistema que identifica este tipo de mensajes y los baja automáticamente”, defiende Rivero.
El también egresado de la carrera de Relaciones Industriales y Laborales en la Universidad Cornell, no considera que Elon Musk tenga malas intenciones, pero sí esta seguro de que el magnate y dueño de Tesla está, de algún modo, desinformado.
“El free speach (libertad de expresión) defendido en la primera enmienda de la Constitución de los Estados Unidos aplica al gobierno y no a compañías privadas como Facebook o Twitter”, observa Omar,, quien, por lo mismo, insiste en la idea de expulsar de Tribel “a todo el que difunda mensajes homofóbicos o racistas, pues no seremos como Twitter o Facebook que han consentido la participación de figuras como Trump, pese a su discurso de odio, porque les representa un gran negocio”.
Cumpliendo 36 años este viernes 28 de octubre, y en los Estados Unidos desde los 8, Omar comenzó a interesarse en los asuntos sociales luego de que su padre, un compatriota que, “tras de ser jefe en México”, sufrió la pauperización de su vida laboral en los Estados Unidos.
Cuenta que luego de tener un trabajo con beneficios, el cambio de algunas leyes laborales convirtió a su padre en un contratista ausente de beneficios y con un sueldo rebajado para quien “poner comida en la mesa y cuidar a su familia” significó un reto. Eso le despertó a Rivero el interés por involucrarse más en política, siendo el ataque a las Torres Gemelas del 11 de septiembre un empujón más para indagar por “lo que estaba pasando a nivel global”.
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Al salir de la universidad Omar se dio cuenta de que “era un pobre con deudas estudiantiles”, así es que buscando ganar dinero optó por una maestría en negocios en la European School Managment, y desde entonces visualizó Tribel, para lo cual cuál pagó 300 dólares al mes a un desarrollador “de lo que ganaba limpiando cuartos, que es a lo que me dedicaba entonces”.
Pero fue su intento de acercarse al movimiento Occupy Wall Street, ese que “buscaba regular a los bancos, cuidar el medio ambiente, y la clase media y laboral de los Estados Unidos” lo que terminó por ofrecerle la visión del negocio buscada.
“Ellos no querían involucrarse en política” cosa que a él le parecía un error así que intentó con la página en Facebook “dirigida a quienes apoyaban las luchas de Occupy Wall Street pero que también deseaban cambiar y empujar al Partido Demócrata” en la dirección de las causas sociales.
Aunque a Occuppy Democrats lo siguen en Facebook 10 millones de personas, de momento su nuevo lanzamiento, Tribel, cuenta con casi medio millón de suscriptores, que seguro se multiplicarán de manera dramática cuando Elon Musk anuncie oficialmente la compra de Twitter.
“Estamos esperando eso”, expresa Omar con una mezcla de agobio y emoción.
Y en lo que gestiona lo mejor que puede la página para la oleada de suscriptores por venir, Omar manifiesta no tener miedo de las amenazas.
“Cada vez se pone peor la cosa, pero no voy a dejar que me intimiden y me desvíen de la misión de crear una red social más positiva que ayude a la humanidad”.
Irónicamente, un mensaje muy similar lanzó Elon Musk en estas horas previas a la adquisición de Twitter.
ehr