El millonario de la industria del juego, Rodney Baker, junto con su esposa, la actriz Ekaterina, han sido foco de críticas y protagonistas de la indignación de la opinión pública luego de conocerse que fueron multados por viajar hacia una comunidad indígena en Canadá donde recibieron la vacuna contra el coronavirus de Moderna.
Según el reporte de la cadena CBC, ambos están acusados de volar 450 kilómetros desde Vancouver a Whitehorse, capital de Yukon, cerca de la frontera con Alaska.
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El viaje comenzó el 19 de enero y se suponía que tenían que cumplir con un aislamiento de 14 días, pero el ministro de Servicios Comunitarios de Yukon, John Streicke, reportó que el 21 de este mes la pareja llegó a una comunidad de 100 personas en Beaver Creek para vacunarse contra el covid-19 con la dosis de Moderna, afirmando además que eran empleados de un motel local.
Baker, tras conocerse el caso que provocó indignación, dejó su cargo como presidente y director ejecutivo de Great Canadian Gaming. La pareja fue descubierta por las autoridades al comprobarse que, horas después de vacunarse, no aparecía en los registros de trabajadores del motel y ya no estaban en el lugar, habían viajado de regreso en un avión rentado.
La situación ni siquiera se justifica por la edad de la pareja, él tiene 55 años y ella 32. Cuando llegaron a nuevamente a Whitehorse, ambos fueron multados con 500 dólares, sin descartarse otra eventual sanción que puede llegar a los 5 mil dólares y hasta seis meses de prisión.
Desde The Globe and Mail informaron que por su dimisión, Baker obtendrá 4.3 millones de dólares, pudiendo obtener aún más si es que la empresa logra ser adquirida por una firma de Estados Unidos. De hecho, hace 13 meses el magnate ganó 45.9 millones de dólares.
En todo caso, la situación no deja de ser indignante para Canadá, donde se han reforzado las medidas de restricción por el coronavirus, en los cuales se incluyó recientemente la cancelación de vuelos hacia México por la nueva cepa del covid-19.
El gobierno canadiense ha enfocado también sus esfuerzos a que la dosis sea recibida por los grupos más vulnerables y que además conforman parte de las dificultades de acceso a las dosis, como son los grupos de los pueblos originarios.
OMZI