El grupo armado libanés Hezbolá lanzó una serie de ataques con drones y cohetes contra el norte de Israel, cuya defensa aérea se activó pero uno de los proyectiles "falló" e impactó contra una carretera transitada.
Autoridades médicas israelíes dijeron que siete personas fueron evacuadas al hospital, al sur de la ciudad costera de Nahariya, una de ellas en estado crítico, por el accidente que ya es investigado.
El Ejército israelí dijo que una investigación inicial indicó que las lesiones fueron causadas por un interceptor que "falló el objetivo y golpeó el suelo, hiriendo a varios civiles". Afirmó que el incidente seguía bajo revisión.
Imágenes de Reuters TV mostraron un impacto cerca de una parada de autobús en una carretera principal a las afueras de Nahariya.
Hezbolá reivindicó el lanzamiento de un enjambre de drones de ataque contra dos emplazamientos militares cerca de Acre, en el norte de Israel, y también dijo que atacó un vehículo militar israelí en otro lugar.
En un comunicado, el Ejército israelí dijo que sonaron sirenas en los alrededores de Acre, pero que resultó ser una falsa alarma. La aviación israelí atacó dos instalaciones de Hezbolá en el sur del Líbano.
Así fue la explosión:
Aumentan los temores de que Medio Oriente se vea abocado a una guerra total tras las promesas de Hezbolá de vengar el asesinato de su comandante Fuad Shukr, y la amenaza de Irán de responder al asesinato en Teherán del jefe del grupo miliciano palestino Hamás la semana pasada.
Una fuente de Hezbolá dijo a Reuters que "la respuesta al asesinato del comandante Fuad Shukr aún no ha llegado".
Antes, el martes, cuatro personas murieron en un ataque contra una vivienda en la localidad libanesa de Mayfadoun, a casi 30 kilómetros al norte de la frontera, según informaron autoridades médicas y una fuente de seguridad.
Pánico por el misil que falló:
Otras dos fuentes de seguridad dijeron que los muertos eran combatientes de Hezbolá, pero el grupo aún no había publicado sus habituales avisos de muerte.
Hezbolá y el Ejército israelí han estado intercambiando disparos durante los últimos 10 meses, paralelamente a la guerra de Gaza, y los ataques se han limitado principalmente a la zona fronteriza.
La semana pasada, Israel mató a Shukr, el principal comandante militar de Hezbolá, en un ataque contra el bastión del grupo en los suburbios del sur de Beirut, la capital libanesa.
El líder de Hezbolá, Sayed Hasán Nasralá, prometió venganza, pero dijo que la respuesta sería "estudiada". Está previsto que hable el martes en el acto conmemorativo de una semana de Shukr.
SNGZ