En Nigeria, unos 200 estudiantes de la Escuela Islámica Salihu Tanko de Tegina fueron secuestrados en un ataque armado, al parecer para pedir por ellos el pago de un rescate. Además, una persona murió y otra resultó herida de gravedad, de acuerdo con información del diario nigeriano Punch.
El secretario del gobierno provincial, Ahmed Matane, confirmó el ataque, pero no ha concretado la cifra de estudiantes raptados.
"Sí. Ha habido un ataque a la escuela coránica, pero no tenemos aún la cifra exacta de estudiantes que han sido secuestrados. Estamos en contacto con las familias de la zona para determinar cuántos niños han sido secuestrados".
Otro portavoz estatal informó que "quienes no puedan cruzar la zona boscosa serán liberados" y confirmó dos personas heridas por arma de fuego en el ataque.
"Un número todavía indeterminado de alumnos de la escuela islámica Salihu Tanko fueron secuestrados junto con pasajeros de un autobús", indicó el gobierno del estado nigeriano Twitter.
También confirmó el ataque la policía estatal a través de un portavoz, Wasiu Abiodun, "el 30 de mayo de 2021 sobre las 15:00 horas bandidos armados en motocicletas invadieron la localidad de Tegina, Rafi, disparando indiscriminadamente y han secuestrado a una cifra aún por determinar de niños de la Escuela Islámica Salihu Tanko de Tegina".
Por el momento se desconoce qué grupo ha estado detrás del ataque contra la escuela en medio de un aumento de este tipo de incidentes que llevó al cierre de centros educativos en varios estados del país africano.
"Los raptores liberaron a 11 niños que eran demasiado pequeños para caminar", indicó el gobierno que denunció un acto "lamentable" y el aumento de secuestros contra el pago de un rescate en el centro y en el norte del país.
En la escuela islámica Salihu Tanku se encontraban unos 200 alumnos en el momento del ataque, pero varios lograron huir, indicó un miembro del equipo directivo.
El rapto se produjo un día después de que 14 estudiantes del estado de Kaduna fueran liberados tras haber estado 40 días secuestrados.
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Los ataques en Nigeria, anteriormente centrados en la zona noreste del país -donde operan Boko Haram y su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA)- se han extendido durante los últimos meses a otras zonas del norte y el noroeste, haciendo saltar las alarmas por la posible expansión de estas redes terroristas y criminales.
Naciones Unidas ha lamentado el asedio que sufren los estudiantes de la región, ya que recientemente produjo, por ejemplo, el secuestro de cerca de 280 niñas en el estado de Zamfara, ya liberadas, al noroeste del país, mientras en diciembre más de 300 niños fueron también secuestrados.
El 14 de abril se cumplieron siete años desde el secuestro por el grupo armado Boko Haram de 300 niñas en el norte de Nigeria. El ataque sacudió al mundo y levantó olas de indignación pidiendo la liberación de las niñas. La mayoría de las niñas escaparon o fueron liberadas después, pero más de un centenar permanecen cautivas.
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