Permitirle al presidente ruso, Vladimir Putin, participar en la cumbre del G20 de este año sería "ir demasiado lejos", advirtió el jueves el primer ministro australiano, Scott Morrison.
Putin ya fue invitado a la cumbre del G20 de noviembre en Yakarta y pretende participar a esta, aseguró esta semana el embajador de Rusia en Indonesia.
Pero Morrison se opuso, debido a la guerra rusa en Ucrania.
"Creo que tenemos que tener en la sala a gente que no está invadiendo otros países", declaró.
Morrison dijo que ha estado en "contacto directo" con el presidente indonesio, Joko Widodo, sobre la participación de Putin en la cita de las 20 grandes economías, incluidas Argentina, Brasil, México, Estados Unidos, China, Japón y países europeos.
"Rusia invadió Ucrania. Ese es un acto violento y agresivo que hace añicos el derecho internacional", aseguró el líder australiano en una conferencia de prensa en Melbourne.
"Y la idea de sentarse en una mesa con Vladimir Putin... para mí es ir demasiado lejos", agregó.
China calificó esta semana a Rusia como un "miembro importante" del G20 y dijo que ningún integrante tiene derecho de expulsar a otro país, luego de que Washington planteara excluir a Moscú.
Morrison señaló que Australia y Holanda iniciaron este mes acciones legales contra Rusia por la caída del avión MH17 de Malaysia Airlines, derribado sobre Ucrania el 17 de julio de 2014, en el que murieron todos a bordo.
Investigadores internacionales dicen que fue impactado por un misil trasladado desde una base militar rusa.
"Así que conocemos la forma de (actuar de) Vladimir Putin cuando se trata de tomar la vida de civiles inocentes", señaló Morrison.
Australia anunció el domingo la prohibición de exportar aluminio y bauxita a Rusia y ofreció más armas y ayuda humanitaria a Ucrania.
RM