El director del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, David Beasley, aseguró que con una fracción del tamaño de las fortunas del director y fundador de Tesla y Space X, Elon Musk, y de Amazon, Jeff Bezos, podría resolverse el hambre a nivel mundial.
"Los multimillonarios deben dar el paso al frente ahora, por única vez [...] con 6 mil millones de dólares nos ayudaría a 42 millones de personas que van a morir (de hambre) si no los alcanzamos," aseguró Beasley en entrevista con CNN.
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Alertó que diversas crisis, incluida la del calentamiento global, podrían formar una "tormenta perfecta" en la que muchas naciones estarían "llamando a la puerta de la hambruna".
El funcionario de la ONU hizo el llamado a que sólo se colabore con el 2% de las fortunas de Musk o de Bezos para poder combatir la crisis alimentaria en el mundo. Ambos magnates han incrementado exponencialmente su patrimonio durante la pandemia de covid-19.
Aseguró a la CNN que países como Afganistán y Etiopía son los que están en mayor riesgo de padecer una crisis alimentaria si no se toman acciones.
Estimó que 5.2 millones de personas en la región del Tigray —donde se está el conflicto entre el gobierno de Addis Adeba y los separatistas— necesitan urgentemente asistencia alimentaria para los miles de civiles que resultaron desplazados, asegurando que las Naciones Unidas han luchado por enviar suministros a la región.
"No sé de dónde obtienen la comida", reiteró Beasley a CNN . Nos hemos quedado sin combustible. Nos hemos quedado sin efectivo, en términos de pagar a nuestra gente, nos estamos quedando sin dinero y no podemos subir nuestros camiones".
Por el lado de Afganistán, Beasley aseguró, con base a un informe de la ONU, que 22.8 millones de personas en el país, entre ellos 3.2 millones de niños, enfrentan una aguda crisis de hambre debido a la crisis derivada del conflicto talibán y la inestabilidad política que ha permeado en el país desde hace décadas.
Destacó también que la crisis climática está impulsando la migración de centroamericanos hacia Estados Unidos, en el que ahora se considera el "Corredor Seco", esto impulsado por los huracanes y las inundaciones que se han encrudecido en los últimos años.
"Por ejemplo, tomemos a Estados Unidos y la región de Centroamérica, el Corredor Seco, Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua, solo en esa área estamos alimentando a mucha gente allí y el clima está cambiando con huracanes e inundaciones repentinas; es simplemente devastador", añadió destacando que Washington ya ha reconocido la crisis climática como parte de la migración.
dmr